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Menos militares, más rapidez

Por: Rodrigo Zambrano | Publicado: 04.02.2023
Menos militares, más rapidez Menos militares, más rapidez | Cedida
Los encuestados creen que el principal factor disuasivo no es militarizar las fronteras, sino más bien que Chile cuente con una institucionalidad que permita la expulsión de inmigrantes en forma rápida y expedita.

La última encuesta realizada por Research Chile reflejó que un 27% de los encuestados está a favor de que las fronteras sean resguardadas por las FF.AA. El apoyo a que las fronteras (definidas como infraestructura crítica) sean custodiadas por personal armado es alto. No obstante, la opción que obtuvo mayor adhesión, alcanzando un 49% de las preferencias, es la relativa a la expulsión inmediata de inmigrantes irregulares, por lo que, a juicio de los encuestados, la solución no estaría en militarizar nuestras fronteras, sino más bien en dotar al Estado de las herramientas necesarias para que el proceso de expulsión sea rápido y expedito.

Por tanto, la pregunta que debiéramos hacernos, y que no veo en el debate público, es: ¿por qué la ciudadanía se inclina más por una expulsión rápida de inmigrantes y no por la militarización de nuestras fronteras?

A mi entender, la ciudadanía visualiza dos problemas; uno de carácter operativo y otro de carácter inmediato.

Desplegar las FF.AA. en la frontera norte apunta al primer problema. La ciudadanía considera como ineficiente e ineficaz desplegar contingente militar con atribuciones propias de orden público. Estas (las FF.AA.) al no estar preparadas para resguardar el orden público, implicaría necesariamente un adiestramiento que trae consigo retraso y en los primeros momentos errores en aplicación.

Un argumento simplista diría que las FF.AA. deben obedecer al poder civil y, por ende, desplegarse si así se los piden. Eso no está en discusión, y creo que el argumento del general Iturriaga en el Congreso lo dejó claro, pero resguardar el orden público es distinto y requiere de una preparación seria y planificada, y el resguardo de la frontera en el contexto actual sería acelerado y desprolijo, cosa que podría generar el efecto contrario al buscado, que es la disuasión.

El segundo problema que visualiza la ciudadanía es el hecho de que, por mucho que se resguarde las fronteras, el problema migratorio ya está instalado en las grandes ciudades del país, siendo esto la principal razón de que la ciudadanía se incline por procesos administrativos de expulsión de inmigrantes. En otras palabras, los encuestados creen que el principal factor disuasivo no es militarizar las fronteras, sino más bien que Chile cuente con una institucionalidad que permita la expulsión de inmigrantes en forma rápida y expedita.

Actualmente la Ley de Migración y Extranjería dispone, en su artículo 132 (en relación con lo dispuesto en el artículo 147 del mismo cuerpo normativo), que el inicio del procedimiento administrativo de expulsión deberá notificarse personalmente al afectado, por intermedio de la Policía. Esta disposición hace que la norma sea excesivamente engorrosa, impidiendo en muchos casos que los procedimientos de expulsión puedan siquiera ser iniciados administrativamente.

Por ello sorprende que la ciudadanía la tenga clara (una vez mas) diagnosticando en forma correcta el problema y viendo nítidamente la alternativa más efectiva. La solución no se basa exclusivamente en militarizar la frontera, sino más bien en que el gobierno impulse y promueva (más allá de un twitter) acciones tendientes a agilizar dichos procedimientos. Por ejemplo, una de las iniciativas que actualmente impulsa el gobierno se basa en agregar formas alternativas a la notificación personal (para efectos de expulsión de inmigrantes irregulares) tales como la notificación por correo electrónico. Este simple hecho permitiría un proceso de expulsión más expedito. Sin embargo, es menester señalar que dicha expulsión no debe ser antojadiza y arbitraría, sino mas bien regulada y fundada, para así resguardar los derechos de las personas que vinieron a nuestro país en búsqueda de un mejor futuro.

Rodrigo Zambrano
Director Ejecutivo de Research Chile.