Libertad de acción con olor a Rechazo: La definición del PDG frente al Plebiscito

Días antes de la definición de la segunda vuelta presidencial en 2021, en la página web del Partido de la Gente (PDG) se informó la habilitación del portal votapdg.cl, para que sus adherentes inscritos pudieran manifestar su opinión sobre si querían o no la realización de una consulta ciudadana para definir la postura del partido. Es decir, una votación para ver si se votaba.

Tras intensas semanas de agitación digital, finalmente el partido —que fue la principal base de la candidatura de Franco Parisi— decidió respaldar a José Antonio Kast (61,41%) sobre Gabriel Boric (6,58%). Más del 30% restante se repartió entre la opción de dar libertad de acción y nulo.

El hecho marcó un precedente para uno de los ejes del PDG: la democracia digital, que la colectividad pretende volver a implementar para determinar si irán por el Apruebo o el Rechazo en el Plebiscito de Salida de la nueva Constitución.

Consultados por El Desconcierto, parlamentarios del partido aseguran que la fórmula será la misma. Sin embargo, recalcan que su resultado será simbólico, ya que no habría sanciones ni represalias para quienes no sigan la alternativa de la mayoría.

Si bien en el PDG consideran que es posible que se incluya la opción «libertad de acción» en la papeleta, lo cierto es que esa ya es la postura oficial del partido, independiente del resultado de la consulta.

La lupa del PDG sobre la nueva Constitución

Según el diputado Rubén Oyarzo, esta consulta debería realizarse —si se vota finalmente que se haga— el día 12 de julio. Hasta entonces, asegura, desde la bancada y la directiva de la tienda política se dedicarán a «bajar» la información a la militancia para que, sea cual sea la opción por la que se decidan, se trate de un voto reflexionado y marcado a consciencia.

Esto en el contexto de que, en los diferentes espacios del partido, hay una opinión dividida con respecto al borrador y al trabajo constituyente.

Por ejemplo, para la jefa de la bancada del PDG, Yovana Ahumada, la mayor preocupación que existe con el proyecto de nueva Constitución es que «hoy hay un conflicto económico, por lo que se generan complicaciones, sobre todo en cómo vamos a generar los recursos para tener un Estado más grande».

Si bien la parlamentaria reafirma que «jamás vamos a actuar como bloque dándole órdenes a nuestros adherentes», sí reconoce que al interior de la colectividad predomina una postura contraria al texto emanado de la Convención.

«Nuestras bases representan bastante a lo que hoy vemos en general en la sociedad. Tienen muchas necesidades que no sé si la Constitución que se está entregando va a resolver. No podría decir si nos vamos a inclinar hacia uno u otro lado, pero creo que así como lo muestran las encuestas, las dudas hacen que una persona pueda ir más hacia el Rechazo que hacia el Apruebo», puntualiza.

Los Bad Boys y el factor Logan

Liderazgos del partido señalan que esta tendencia a rechazar tiene distintas vertientes. Uno de los más relevantes es sin duda el programa por Youtube de su fundador Franco Parisi, Bad Boys, donde los panelistas, quienes comentan y la mayoría de los invitados son contrarios a la nueva Constitución.

Según las fuentes, este es uno de los referentes ideológicos más grandes que tiene la militancia del PDG —partido con mayor número de adherentes en Chile—, ya que, aún cuando el rol y exposición del excandidato a la Presidencia ya no es el mismo que el año pasado, continúa siendo uno de los «liderazgos naturales» según el diputado Oyarzo.

«Su opinión vale y pesa, yo me comunico directamente con él por teléfono», manifiesta, puntualizando que no es el único parlamentario de la bancada que conversa periódicamente con Parisi.

Y justamente, uno de los últimos invitados de este show virtual que conduce el expresidenciable fue el convencional independiente Rodrigo Logan, quien es muy cercano al partido —tanto que participó de la campaña para juntar firmas— y que, de acuerdo a Ahumada, «es el constituyente con el que más contamos para tener una información directa. Ha estado siempre disponible».

Logan no sólo ha participado de reuniones privadas con la directiva y la bancada del PDG, sino también ha explicado el borrador en reuniones virtuales con adherentes, convirtiéndose en una de los principales líderes de opinión de este grupo.

En dichas ponencias ha vertido varias críticas a la nueva carta fundamental. De hecho, en el programa Bad Boys del 31 de mayo, el abogado cuestionó ámbitos de la nueva Carta Magna, como el sistema de justicia y la plurinacionalidad.

En el mismo espacio se rieron porque un canal de televisión vinculó a Logan con el Apruebo. El convencional independiente no explicitó su opción, pero sí lamentó que «nos estamos farreando una oportunidad» con el texto que está saliendo de la Convención.

El Desconcierto trató de comunicarse con Rodrigo Logan para conocer su postura y principales puntos que ha expuesto en estas reuniones con el PDG. Sin embargo, no hubo respuesta.

Reforma tributaria: PDG abierto a conversar

El Desconcierto también consultó a la bancada del PDG cómo están los ánimos de cara a la inminente presentación de la reforma tributaria que el ministro de Hacienda, Mario Marcel, ingresará la próxima semana.

La posición que tome la tienda podría ser determinante para el proyecto y servirá de referencia para ver la fuerza legislativa que tendrán las siguientes iniciativas de la administración de Gabriel Boric, como por ejemplo la Reforma de Pensiones.

Para aprobar el grueso del plan impositivo del gobierno, se requiere un quórum de mayoría simple en el Congreso: 23 votos en el Senado y 78 en la Cámara de Diputados. Es en esta última instancia donde el PDG podría jugar un rol muy relevante. Sin embargo, no están para nada conformes con el actuar del Ejecutivo durante la etapa prelegislativa.

«Queremos participar de la reforma tributaria, y es lo que siempre le hemos dicho al gobierno. Nosotros podríamos ser sus mejores aliados pero… no nos pescan«, se lamenta el diputado Oyarzo, quien agrega que no están contrarios a aumentar el impuesto a la riqueza (antes denominado como «impuesto a los súper ricos»), pero sabe que no se recaudará lo que se espera con esta medida.

En esa misma línea, el parlamentario señala que «lo hay ahora es un mal escenario, pero nosotros no somos de cerrar la puerta (…) estoy de acuerdo en cobrar impuestos pero no a la clase media, no a la gente que se saca la cresta todos los días trabajando».

Por su parte, la jefa de la bancada admite su preocupación sobre cómo llegarán los recursos recaudados a la ciudadanía y específicamente a la clase media, cosa que para ella aún no está muy clara y deja bastantes dudas con respecto al proyecto de reforma.

Actualmente, el oficialismo cuenta con 62 de los 78 votos que se necesitan en la Cámara Baja. Ahora que el Parlamento quedó fragmentado, esos 16 restantes se podrían completar con los diputados radicales, democratacristianos, ecologistas verdes y humanistas. Sin embargo, de haber descuelgues, una alternativa para el gobierno podría ser negociar con los seis representantes del PDG en la Cámara.