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Bernardo de la Maza: “No tengo mucha confianza en los sondeos, cualquier cosa puede pasar”

Por: Mario Gutiérrez | Publicado: 23.08.2022
En otra edición del programa “Manos Libres” en colaboración con El Desconcierto, el exconvencional habla sobre el Plebiscito, además de su desazón con el trabajo de la Convención y con una propuesta que califica como “excesivamente progresista, con un lenguaje impreciso, partisana, estatista e indigenista”. “Todo habría sido distinto con Agustín Squella” en la presidencia de la entidad, reflexiona.

Convencido de que Chile requiere modificar la actual Carta Magna, pero a disgusto con la propuesta final del texto, se define el exconvencional Bernardo de la Maza. Al ser consultado por sus razones para no aprobar este 4 de septiembre, señala: “Yo entré con mucho optimismo, estuve por el Apruebo de entrada desde siempre y con mucha fuerza; estaba y estoy completamente convencido de que hay que hacer muchos cambios muy importantes en nuestro país, pero creo que no había que refundarlo”.

Entrevistado en una nueva edición del programa “Manos Libres” en colaboración con El Desconcierto, el exconductor de televisión reflexiona: “Al comienzo estaba muy contento, pensaba que íbamos a llegar a grandes acuerdos que nos hicieran, finalmente, aprobar una Constitución con el 80% ó 90% de la población, unirnos desde la izquierda moderada hasta la derecha más moderada, pero eso no ocurrió”.

“Ahora estoy muy preocupado, tengo la esperanza de que las encuestas tengan la razón y gane el Rechazo, pero no le tengo mucha confianza a los sondeos, porque como periodista internacional he visto fallos enormes y siento que cualquier cosa puede pasar este 4 de septiembre. Creo que si gana el Apruebo va a ser muy malo, muy dañino porque esta propuesta es radical, refundacional. Como lo dijo la revista The Economist es absurdamente larga, tiene más de 50 mil palabras, 388 artículos, es fiscalmente irresponsable porque hace una serie de promesas que este Estado no va a poder cumplir”.

En cuanto a los contenidos de la propuesta constitucional, De la Maza acusa que “es excesivamente progresista, con un lenguaje impreciso. Yo agregaría que es partisana, estatista e indigenista. Vale decir, tengo una muy mala impresión de lo propuesto. Yo viví el último tiempo dentro de la Convención muy amargado, desilusionado, estresado y así estoy ahora, preocupado, no voy a estar tranquilo hasta que no sean las 7 u 8 de la tarde de ese domingo”.

Y agregó que “esto de una plurinación es tremendamente complicado y nos amenaza. Escuchaba el otro día a un profesor ecuatoriano que decía ‘ahora con la plurinacionalidad ocurre que cuando el Estado quiere entrar en algunos sectores indígenas, ellos les dicen que aquí no entra nadie sin una visa de nosotros’. Tampoco me gusta en lo absoluto esto de la Cámara de Diputados y Diputadas porque tendría un poder tan grande que, con una simple mayoría, podría, el día de mañana, aprobar lo que sea. Si nos toca un gobierno muy de izquierda, podríamos irnos a un régimen tipo Venezuela y, al contrario, si nos toca un populismo de derecha como el de Brasil o más derechista incluso, como Donald Trump, también sería complejo”.

El exconvencional también plantea sus dudas respecto al peso del Estado en el nuevo diseño institucional. “Por otro lado, se promete una linda salud para todos, gran educación para todos, viviendas dignas, agua potable para todos. Estupendo, ¿pero, con qué dinero? Me molesta esto porque somos un país que está en tremendas complicaciones económicas y se pasa al Estado la responsabilidad de todo. La palabra Estado aparece en 500 y tantas oportunidades, el Estado garantiza, el Estado proveerá, etc., y les aclaro una cosa: economía privada, no está ninguna vez; sector privado, ni una vez; pequeña y mediana empresa, tampoco; libre mercado, ni una vez. Cero, mientras que el Estado, ¡cientos de veces! Esta es una propuesta muy mentirosa, falsa y con la que no puedo estar de acuerdo, a pesar de que, lo reitero, lo único que yo quería era una nueva Constitución, pero definitivamente esta no…espero que gane el Rechazo por lo menos por un voto”.

Bernardo de la Maza

Agencia UNO

El rol que no pudo cumplir Agustín Squella

Respecto al clima de beligerancia y polarización que se vivió durante el proceso, y que se puede observar ahora en el periodo de campaña, el periodista sostuvo ello se pudo haber evitado con otra conducción desde el comienzo.

Yo no solo propuse a Agustín Squella como presidente de la Convención, sino creo que todo habría sido distinto con él. Es un tipo de izquierda moderada, gran profesor de Derecho, rector universitario, gran columnista, alguien de una extraordinaria cultura, pero no se dio…eran necesarios cambios importantes y moderados, tanto en el área de derechos fundamentales como en el área política”, comenta.

Al remontarse a los inicios de la Convención, De la Maza añade que “yo creo que había que hacer otras cosas y no las que hicimos, había que terminar con la corrupción que es una cosa que nos daña profundamente como democracia. Uno de los motivos principales por los que la gente por millones fue a marchar poco después del 18 de octubre de manera pacífica y sin colores políticos, eran las colusiones del pollo, el papel confort, los abusos, en fin. Eso es lo que nos está afectando muchísimo como país, y no otras que sí fueron aprobadas”.

Respecto a su rol al interior de la Convención, el periodista confiesa que “yo establecí muy buenas relaciones con gente variada de los distintos sectores, pero al tratar de unirlos políticamente, fracasé”.

En ese aspecto, añadió que “yo tuve largas conversaciones con Agustín Squella y estábamos muy de acuerdo. Al final, él se fue a la izquierda y yo me incliné más por la derecha, siendo que durante toda la Convención estuvimos siempre muy de acuerdo. Criticábamos lo que ocurría adentro que era excesivamente izquierdista, populista, que no era una Constitución que estuviera logrando grandes consensos. Tuvimos una relación extraordinariamente amistosa. Mientras a mí se me miraba con extrañeza por definirme de centro, miren lo que pasó, a él también se le miraba con mucho recelo por declararse como un liberal de izquierda. Y faltando algo así como un mes para terminar, salieron una especie de mapas de las votaciones, y yo, con quien más parecido había votado era con Agustín, siendo que él va por el Apruebo y yo por el Rechazo”.

El acuerdo de propuestas del oficialismo

En este punto, Bernardo de la Maza apuntó que en el oficialismo hay temor a una posible derrota en el Plebiscito. “Creo que está mostrando, sin duda, la certeza que el Apruebo va a perder (o iba a perder, no sé si ahora con esta propuesta vaya a haber algún cambio). Supongo que ellos, a través del gobierno, pueden tener encuestas super serias a las que les creen como para haber sacado propuestas que, realmente, dan pie atrás en mucho de lo que se hizo en la Convención. Recuerdo que César Valenzuela, convencional del Partido Socialista, dijo en El Mercurio que durante el proceso los atacaban, les decían que eran conservadores, amarillos, traidores, cuando proponían justo los cambios que luego se plasmaron en ese documento del que estamos hablando. Creo que lo que se produjo fue una certeza de que la gente no está con el texto final propuesto”.

En su opinión, también se dieron reacciones llamativas “por ejemplo, Manuel Woldarsky, un tipo muy buena persona, enojado por ese acuerdo, dijo en Twitter ‘después no vengan con que no nos vinieron venir’, en lo que a mí me parece una frase bastante amenazante. Es decir, siento que el sector del Apruebo se ha separado mucho y se está reflejando la visión que había al interior de la Convención, que era: una izquierda muy moderada con el PS, que luchó muchas veces por un acuerdo más mesurado; enseguida el Frente Amplio, el Partido Comunista, la izquierda No Neutral, los pueblos originarios que votaron siempre por la izquierda más radical, y a la izquierda de todo eso había personas que eran claramente representantes del octubrismo, o sea, herederos del 18 de octubre, aquellos que estuvieron saltándose los torniquetes del Metro y, probablemente, aplaudiendo los incendios y los asaltos de los supermercados. Era un grupo muy diverso, pero que al final votaron en ese momento igual, como manada”.

Bernardo de la Maza

Agencia UNO

Autoanálisis constitucional y los cambios para la clase política

En cuanto a su participación como independiente en la lista de Evópoli, De la Maza indicó que “yo hubiera querido ir como independiente total, pero no habría logrado nada, y les agradezco a ellos que hayan respetado su promesa de no interferir en mis votos. En ese sentido, nunca tuve una queja de parte de ese partido, pese a que a veces voté con la izquierda o favor de los pueblos originarios o contrario a lo que marcaba el grupo mío, y me siento muy honrado y muy tranquilo. Muchas veces voté por propuestas de la izquierda y en dos oportunidades mi voto fue el que definió que se aprobaran algunas iniciativas de los pueblos originarios. De manera que siempre me incliné por mis convicciones, contrario al grupo de derecha y extrema derecha”.

Y, finalmente, en relación con lo que puede venir para el país, Bernardo de la Maza expone: “Creo que hay que cambiar la clase política, que es muy mala, y esta Constitución no hizo dos cosas muy importantes: una es cambiar el sistema electoral que permite que salga gente por chorreo y que salgan candidatos con bajísima votación y que haya quienes sean diputados con menos de cinco mil votos o que haya llegado a la Convención gente con 100, 200, 400 votos… no merecían estar ahí. El que gane, que tenga por lo menos el 50% más uno con un sistema mayoritario simple, así no llegaría cualquiera. Creo que eso cambiaría radicalmente la composición de la clase política. Y, por otro lado, habría que cambiar la ubicación del Congreso Nacional de Valparaíso a Santiago o en otra ciudad para unirlo al Poder Ejecutivo. Tienen que estar unidos, debieran ser como siameses. ¿Quién se va a querer ir a vivir a Valparaíso? Se llevó para allá para terminar con la pobreza y eso no se ha logrado, Valparaíso está convertida en una ciudad violenta, pobre, llena de rayas. Si queremos tener una buena clase política, que el Parlamento esté muy cerca del Ejecutivo para trabajen juntos y un ministro no se demore dos horas en llegar allá, dos horas más en volver, es mejor que se demoren las pocas cuadras que hay entre el Congreso y La Moneda. Creo que esos esos fueron dos errores que aún se pueden corregir”.

  • El programa “Manos Libres” en colaboración con El Desconcierto se transmite semanalmente en nuestro canal de YouTube.

 

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