Avisos Legales
Reportajes

Hermann Heim: «Me encanta un gobierno que es como yo, con deficiencia de atención»

Por: Joaquín Castro Mauro | Publicado: 25.03.2023
{"multiple":false,"video":{"key":"cz23Cqkmut1","duration":"00:00:00","type":"video","download":""}}
Como miembro de una generación que se atreve a hablar de política con soltura, el comediante Hermann Heim explica a El Desconcierto por qué no invitaría a la doctora Cordero a su programa y cómo fue que la mitad de Chile se quedó «sin personalidad» tras el triunfo del Rechazo.

“El humor es sin pedir permiso, es con pedir perdón”. Con estas palabras, Hermann Heim (27) anticipa el estreno de la edición 2023 de su programa de entrevistas a políticos por YouTube: Caconociéndonos.

El espacio, que nació como un experimento en la Universidad Católica y que ya acumula nueve temporadas, aspira a revertir un escenario electoral que Heim considera como uno de “los más fomes en mucho tiempo”

Por esta razón decidió darle un giro al perfil de sus invitados, algunos de los que ya fueron adelantados en su último tráiler: Carmen Frei (DC), Natalia Piergentili (PPD), Gloria Hutt (Evo), Javier Macaya (UDI) y Vlado Mirosevic (PL)

“Hacemos esto para activar un poco el tema de las elecciones, por eso quisimos revivir los partidos y estamos llenando plazas de cada uno”, plantea.

– Es la elección con menos ruido en mucho tiempo. ¿Cómo se puede revivir el entusiasmo en la política, pero no farandulizarla? ¿Es posible?

Bueno, la delgada línea de a quién se entrevista. Nosotros esta temporada estamos buscando a gente particular que es conocida por su seriedad. Esa es la gracia, no traemos a figuras como Pamela Jiles, sino que estamos hablando con presidentes de partidos, candidatos que llevan mucho tiempo en política y demostrar que son humanos.

En el programa siempre salen unas cuñas que nadie se espera como las que han ocurrido. Ahora deben haber grupos de WhatsApp revolucionados en Evópoli, porque Gloria Hutt salió con un vibrador en la mano. 

– Actualmente existen muchas luchas identitarias en la política. ¿Cuál es la forma en que abordas estos temas sin herir sensibilidades? 

Uno puede pensar que solamente están los camiseteados. Se puede ver en la última elección que uno pensaba que la vara apuntaba para un sector y, lamentablemente, pasó porque esa gente era más ruidosa, estaba más enojada.

En efecto, hay conflicto en la política y nosotros permitimos que la gente diga  y haga lo que quiera. Claro, se pueden enojar porque nosotros mostramos candidatos políticos que son chistosos y las personas los conocen más. Enojarse es gratis, pero hay que querer enojarse, mientras que la risa es involuntaria. Ese es el objetivo: Hacer reír y dar a conocer.

Si alguien quiere que la cuestión sea más seria, para eso está Tolerancia Cero. Los mismos entrevistados, cuando les contamos que Carmen Frei hizo esto o Vlado Mirosevic dijo esto otro, se sorprenden y dicen «¡Oh, es que esa persona es tan chistosa!». Mucha gente sabía que Carmen Frei era simpática, salvo Chile.

– ¿La política se volvió aburrida después del 4 de septiembre?

Después del 4 de septiembre, Chile se quedó sin personalidad. O al menos, la mitad de Chile. La gente ya no tiene por qué luchar y se quedaron callados. Si una de las razones por las que se está hablando poco esta elección es porque hay gente que ya se picó, o que simplemente no quiere seguir intentándolo.

La política es cíclica y el país también. En un momento teníamos superávit de farándula, y pasamos a tener superávit de política. Ahora tenemos un término medio, en que hay futbolistas metiéndose con diputados. Estos pasos también son necesarios.

Hay que pararnos desde un escaparate no tan crítico, más distendido.

– ¿Cómo lo llevas a este punto sin banalizar la conversación?

Ahí depende del invitado. Básicamente es un trabajo en conjunto. Nosotros igual nos esforzamos en nuestra comedia. No hacemos como esos programas de antaño, que es ya que venga esta persona que canta un karaoke y disfracémoslo, sino que es tirar el palo certero. 

Por ejemplo, al presidente de la Cámara Baja (Vlado Mirosevic), le dijimos que yo tengo exparejas que duran más tiempo que él en una coalición, lo que al final es verdad y se da la conversación. Al final, esto es democratizar la política, acercarla a la gente, porque tenemos pocos programas en que se entrevista a alguien de cualquier lado del espectro y es visto por un público transversal. 

Siempre vamos a tener la crítica, es impresionante la cantidad de gente que se enoja, que no soporta. Y es porque entrevistamos a alguien que le molesta. Hay gente que dice que somos un programa de derecha, cuando en el último ciclo entrevistamos a nueve personas de izquierda y dos de derecha.

Tenemos la gracia de que todo el Congreso, la misma gente política, disfruta el programa y se siente parte. Nosotros, después de nueve temporadas, los llamamos y se emocionan, lo pasan bien. 

«Todo presidente va a ser material de humor»

– Hace poco, en el Festival de Viña, no hubo mucho humor político. ¿Hay temor ? ¿Cómo lo ves tú desde tu perspectiva?

El comediante es una instantánea de la realidad. Nosotros mostramos una foto del Chile actual, y al que le moleste esa foto, es porque le molesta cómo está Chile… ¡Cámbielo! 

Además, el humor político es muy local. En los especiales de Netflix y Amazon te piden no hablar de política, pero no por conflicto, sino porque la gente no entiende la referencia. 

Respecto a los comediantes actuales, uno puede ver dos ejemplos muy claros: Luis Slimming y Fabrizio Copano, que si bien hablan de política, hacían chistes de ellos, y eran notables. Después tienes a Nathalie Nicloux, que en el momento que se estaba hundiendo, atinó a decir «yo voté apruebo» esperando un aplauso que no llegó.

Hermann Heim

Hermann Heim. Foto: Gabriel Aránguiz / @gafotografia_portrait

Nuestra misión es hacer reír. La comedia política lleva años en Chile, pero la gente la tiene en un espacio particular. En su momento estaba Eduardo Ravani, que hacía las mejores parodias a Frei. Después estaba Palta Meléndez, que todavía sigue haciendo su comedia en teatros. Al final es algo a lo que nos arriesgamos, es un nicho. 

Yo siento que hacer comedia política es una responsabilidad, en el sentido que hay que demostrar que estas cosas también son interesantes. Nosotros elegimos hacer este programa para hacer interesante la política, porque es necesario. 

Puedo asegurar que, cuando empezaron a salir nuestros TikTok, mucha gente dijo: “Nunca me había interesado, pero era tan simpática esa señora que quise ver qué hablaba, y después me pasé a otro”. 

– ¿Hay demasiado respeto hacia las figuras políticas en Chile?

Sí, al final la gente confunde el sentido del humor con ser falto de respeto. En nuestro programa jamás nadie se ha enojado en ninguna entrevista y saben que es una relación igual de respeto, yo soy súper respetuoso en el detrás cámara con ellos y eso es lo que produce el quiebre.

Me presento respetuosamente y después les pregunto: ¿Arriba o abajo? Y lo pasan bien, muchas veces me dicen que han sido las entrevistas en las que mejor lo han pasado porque se relajan, apagan un poco el switch de la expectativa que hay sobre ellos. 

– ¿Cómo enfrentas el pauteo que hacen los equipos de prensa de los políticos?

Mira a Gabriel Boric. Inevitablemente a él no le puede gustar Taylor Swift, pero su equipo le dijo «te tiene que gustar Taylor Swift, porque las swifties son votos». La última probable decisión personal que tuvo fue el mohicano, que se dejó hace cinco años. 

El objetivo nuestro es que esto no se puede preparar. Cuando estuvo Gloria Hutt, una de las jefas de campaña, antes de grabar, le hizo las preguntas relámpagos, le dijeron «Gloria, si a ti te preguntan piscola con blanca o con negra, tú dices negra, no me importa si no tomas».

Inevitablemente, yo voy y saco otra pregunta, porque esa es la gracia, los desprogramas y al mismo tiempo ellos saben que no les va a pesar tanto. Al final, entre los mismos periodistas conocemos nuestro lugar, yo conozco perfectamente mi lugar y no intento hacer otra cosa.

– Aprovechando que mencionaste al Presidente Boric, ya va un año de gobierno. ¿Cómo ves el rendimiento que ha tenido el gobierno en su primer año?

A mí me encanta ver un gobierno que es como yo, con deficiencia de atención y con problemas juveniles. 

Yo siento que somos el mejor país de Chile. Hay que darse cuenta cómo evoluciona el país: Boric es el primer presidente que tuvo que responder dudas sobre una bandera en un ano.

Cuántos años de democracia tiene en el cuerpo una persona que fue dirigente estudiantil, que egresó de derecho, y ahí estaba, teniendo en su mente una bandera en el ano. Yo creo que el desafío que han tenido ellos es súper grande, acorde a los tiempos, hacen lo que se les exige y ojalá tengan una buena receta para llevar esto adelante.

– ¿Has intentado entrevistar al Presidente en el programa? 

Lo hemos intentado muchas veces, y a través de esta entrevista hago el llamado público. Nuestro fuerte es entrevistar gente con un perfil más piola y Boric es chistoso, es relajado, es tela, como que sería algo ya conocido e incluso se podría relajar más de la cuenta, pero nosotros añoramos poder entrevistarlo.

– ¿Es material para una rutina? 

Definitivamente. Todo presidente va a ser material de humor siempre, porque es la figura más importante de un país. Todos están atentos a sus detalles, a lo que hace y lo que no hace. Siempre va a salir comedia de algún presidente, hasta de Lagos hacían chistes, y Lagos es más fome que un partido por radio. 

Nosotros en el show hablamos directamente de la política y cómo reacciona el chileno ante ella. Nos reímos de cómo ellos debían haber reaccionado en el momento de la bandera en el ano. Porque Boric vio el video y lo primero que hizo fue gritar «¡Camila!».

Mucha gente cree que por hacer un chiste uno está en contra de ellos. No hay necesidad, simplemente es parte de la gracia. Cuando salió el tema de los indultados, yo puse ahí como que el Presidente dijo:  “Último día nadie se enoja” y le dijeron “Gabriel te quedan 3 años”.

«Camila Vallejo es el mártir de Chile»

– En el gabinete del Presidente hay muchos ministros interesantes. ¿Alguno en particular que te llame la atención?

Yo lo que más quiero en la vida, y lo que le pido al mundo, es por favor tener a Camila Vallejo. Porque es algo que amamos en el programa. Es el verdadero mártir de Chile, una mujer que no carretea desde que asumió porque todas las cagadas pasan un sábado. 

Yo sé que el país está tranquilo cuando Camila Vallejo no aparece en Mesa Central. Significa que esa semana estuvo piola.

– ¿Y Giorgio?

Giorgio es una persona a la que le gusta trabajar, es de servicio público. No necesitaba estar tan en la palestra agarrándose con todos los diputados. Él tenía que estar ahí repartiendo cajas de mercadería. 

A él lo conocemos, es de nuestra universidad, fue de nuestros primeros entrevistados. 

– ¿Cuál es la figura que más te gustaría que estuviera en el programa?

Michelle Bachelet, la mamá de Chile. Eso es algo que solo con estar ahí se vende solo. Es una entrevista que la gente esperaría y solo podría ser buena. 

Mientras más seria e importante la figura, mejor va a ser el capítulo, esa es la gracia. Estuvimos ahora con el presidente de la Cámara de Diputados en una cuneta y eso es rupturista. 

– ¿Y personajes como la Doctora Cordero o Johannes Kaiser?

Ahí es donde nosotros tenemos que tener un poco cuidado, porque la clave es que tenemos que reírnos juntos, y eso nos da susto.

Por las declaraciones que da la doctora Cordero, da miedo. Si hacemos una entrevista con ella se nos van a tirar encima en un sentido y yo no estaría tan cómoda haciéndola. 

Pero en ese sentido, también está la responsabilidad. Mucha gente nos dice «entrevistaron a Kast» y es obvio, era candidato a Presidente de la República.

Déjanos tus comentarios
La sección de comentarios está abierta a la reflexión y el intercambio de opiniones las cuales no representan precisamente la línea editorial del diario ElDesconcierto.cl.