Dirigenta de pescadoras por Neme: «No es vestir caletas de rosado, es dignidad laboral»

La iniciativa de las caletas con perspectiva de género, que busca mejores condiciones laborales y sanitarias para las pescadoras artesanales a lo largo del país, generó críticas desde diversos sectores políticos por su pertinencia en la actual contingencia marcada por la seguridad.

Esto luego que el periodista y conductor del Matinal Mucho Gusto, José Antonio Neme, fuera trending topic representando las burlas generadas hacia la iniciativa de abordar con «perspectiva de género» el trabajo de las mujeres de la industria de la pesca artesanal. La polémica incluyó comparar la priorización de los temas de seguridad en desmedro de la histórica lucha de las llamadas pescadoras e, incluso, con reacciones del Presidente Gabriel Boric de por medio.

Una polémica que, en todo caso, sirvió para poner en el tapete el proyecto que mejora la infraestructura portuaria, con una inversión de$17 mil millones, e impulsar y visibilizar el trabajo económico de más de 25 mil mujeres del sector, apoyando su autonomía económica y la seguridad social. Todos aspectos no considerados en la actual ley vigente.

Los datos actualizados apuntan a que el 90% de las mujeres de este rubro participan en las actividades conexas a la pesca artesanal; se trata de encarnadoras, charqueadoras, ahumadoras, tejedoras, fileteadoras, carapacheras y desconchadoras que ahora se podrán certificar para su profesionalización.

Desde la caleta de Coliumo, en Tomé, región del Biobío, conversa la Presidenta de la Red Nacional de Mujeres de la Pesca Artesanal, Sara Garrido, con El Desconcierto para profundizar sobre lo que ella define como la búsqueda de «dignidad laboral«.

– ¿Cómo analiza el rumbo que tomó el debate en torno a las caletas con enfoque de género?

-Encuentro desatinados a aquellos periodistas que se jactaron y se burlaron de las caletas con enfoque de género. Mucho de esto tiene que ver con desinformación, que es lo que hace caer en estos errores porque se están haciendo cosas, que espero que no se hayan hecho con mala intención. Porque las mujeres no estamos pidiendo que las caletas y las embarcaciones se vistan de rosado, lo que buscamos es dignidad laboral.

– ¿Qué medidas va a involucrar?

-La infraestructura portuaria la construye el MOP, y durante estos años nunca se había considerado baños y vestidores para las mujeres, o galpones para las rederas y escarnadoras, mesones para las fileteadoras. Es decir, dignidad laboral mirando toda la cadena productiva, no solo la pesca artesanal, porque las actividades conexas, la precaptura y la postcaptura, la realizan mujeres.

Aunque no es solo eso porque, además, como corporación nacional somos impulsoras de la Ley 21.370, que modifica los cuerpos legales e incorpora el enfoque de género, y hemos pedido que en los planes de administración de las caletas estén participando las mujeres con voz y voto, es decir, en la toma de decisiones de la política de desarrollo local pesquero que se quiera desarrollar en una caleta determinada.

No se trata de ponerle un baño a una mujer y listo, es un desarrollo integral, tal como lo dice la Ley de Caletas para los hombres y mujeres de mar. Además de la dignidad de espacios que hoy no se ocupan y tampoco se le permite trabajar a las mujeres en un mundo tan machista como lo son las caletas.

– En 2021 se promulgó la ley 21.370 que modificaba los estatutos para incorporar el enfoque de género, pero no recibía recursos en la Ley de Presupuestos ¿Qué cambia ahora?

-Las actividades conexas nunca habían tenido políticas públicas de apoyo… ahora esto va a responder a las demandas y necesidades que por años hemos tenido.

Hoy no solo se visibiliza al hombre y la mujer que trabaja en el mar, sino que también la pre y la post captura, y se mira la cadena productiva en su conjunto, desde que el pescado sale del mar hasta que llega a la mesa.

Se está realizando un registro de hombres y mujeres de actividades conexas. Hoy hay 25 mil mujeres que trabajan en la pesca artesanal, pero no sabemos cuántas hay en específico en la pre y post captura. Recién, cuando tengamos ese levantamiento de información, podremos recibir financiamiento desde el Indespa.

– ¿Ve reflejo de un enfoque de género en la nueva Ley de Pesca?

-Esta propuesta va más allá de las cuotas de pesca, fraccionamiento y licitaciones que es lo que le interesa a la industria pesquera; considera un enfoque de género, una plataforma social para la pesca artesanal, el tema ambiental, que son temas importantes para lograr una ley actualizada y moderna.

La plataforma social, en específico, es un avance importante porque hoy los pescadores no cotizan. Si un pescador muere en alta mar, la mujer queda sola con los hijos y no tiene ningún tipo de seguridad social. Las enfermades de los pescadoras y pescadores, propias del trabajo profesional, no estaban consideras hasta ahora.

«Nosotras creemos que es el momento que nuestros parlamentarios legislen una norma desde la transparencia y la probidad, para que se recuperen las confianzas entre el Congreso y la ciudadanía. Esto porque sabemos que en la ley actual muchas de nuestras autoridades se corrompieron al momento de legislar», enfatiza la dirigenta en relación a la llamada ley Longueira.