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«Esto no prendió»: el último libro de Malaimagen

Por: Elisa Montesinos | Publicado: 30.03.2020
«Esto no prendió»: el último libro de Malaimagen |
“Esto no prendió” (Penguin Random House), el último libro del dibujante Guillermo Galindo, más conocido como Malaimagen, acaba de ser presentado en un lanzamiento online. Debía salir antes del plebiscito, pero las circunstancias quisieron que se publicara en medio de las crisis sanitaria global y en cuarentena. Por sus páginas desfilan Mañalich, Blumel, Lavín, militares, personeros de gobierno y políticos de distintos sectores, pero sin duda el que se roba las escenas es el presidente Piñera, a quien apoda simplemente «El Pizzas».

Malaimagen es quizás el dibujante más popular del momento. Con gran ironía sus dibujos dan cuenta del malestar social, en este libro más que nunca. Por lo mismo lo define como el más importante de su carrera. Algunas viñetas se le ocurrieron en medio de una protesta, y el libro tiene ese ritmo del proceso que hemos vivido en este tiempo. En él da cuenta de los principales acontecimientos de los primeros meses del estallido social, y se permite no solo tomar partido a través de sus dibujos, sino además a través de textos de su autoría en que contextualiza el día a día de la revuelta.

-Esto no prendió parece ser tu aporte a la revuelta, donde no solo entregas tu visión con las viñetas, sino a través de textos, de hecho terminas con la frase «Aún no hemos conseguido nada».

-Desde hace años he venido registrando con mis dibujos los hechos de la contingencia que considero relevantes tratar, y en este caso me pareció importante que el libro registrase tanto lo «humorístico» de la revuelta y el pésimo manejo de las autoridades ante esto, como también hablar de las cosas graves, como las violaciones a los DDHH que el Estado ha realizado de forma sistemática, como un grano de arena en que nada de esto se olvide ni quede impune. Y creo que toda esta revolución no puede quedar solo como algo épico y simbólico; tiene que haber cambios, conseguirse logros, y hasta el momento no se ve ninguna voluntad real al respecto, por lo que hay que seguir presionando.

-¿Por qué querías que este libro saliera antes del plebiscito y por qué lo consideras el más importante de tu carrera?

Desde que comenzó la revuelta empecé a ver muchas pancartas con dibujos míos, de personas que elegían mis personajes para sus carteles, los redibujaban y resignificaban, lo que fue muy emocionante para mí como autor. Esto me confirmó que mi trabajo le hace sentido a muchas personas y sentir esa conexión fue muy motivante para seguir. Eso le dio -para mí- un carácter distinto a mis libros anteriores, además porque se trata de un periodo histórico que nunca pensé que iba a vivir. Y me parecía un buen mes que saliera justo en el mes del plebiscito, pero bueno, el coronavirus quiso que saliera antes, pero mucho antes.

-¿Cuál crees es el rol del humor gráfico en momentos como el que vivimos?

-No quisiera hablar por el humor gráfico en general, pues hay muchos tipos de humor gráfico y cada autor/autora sabrá pa´ qué lo hace, puede ser un vehículo de recreación, crítica, denuncia, y mil cosas más, para mí es mi forma de comunicarme, mi tribuna de expresión. Desde siempre me ha gustado comunicarme a través de dibujos, y encontré en el humor gráfico un lugar que me acomoda para liberar las cosas y cuestionamientos que rondan en mi cabeza, sobre los temas que me van interesando. Para mí es importante que acompañe este periodo histórico, como una de tantas formas más de presión y expresión.

-Cuéntanos sobre el proceso de este libro, en qué condiciones fueron apareciendo las viñetas y cómo el presidente Piñera se fue convirtiendo en uno de sus personajes principales.

-Generalmente las ideas para dibujar me aparecían en momentos diversos, a veces me devolvía de una protesta porque se me había ocurrido una idea de viñeta, y otras veces se me ocurrían varias viñetas el mismo día y tuve que estar muy atento y lo más productivo posible para que no se pasaran temas relevantes. Otras veces estaba con poca inspiración y simplemente anotaba el hecho que me había llamado la atención, para dibujarlo más adelante y no dejar «vacíos» en cuanto a la cronología. Y Piñera (o «El Pizzas») siempre se las arregló para llamar negativamente la atención, ya sea con sus discursos reiterativos en cadena nacional donde no decía nada, o sus ya característicos chascarros y torpezas. Para más mal que bien, es inevitablemente el personaje que más me toca dibujar.

-¿Cómo estuvo el lanzamiento online y cómo te relacionas con tus seguidores?

-Estuvo muy bien, participó mucha gente. Siempre que tengo alguna actividad, parte de mí tiene un miedo de que no llegue nadie, pero no ocurrió, en realidad la gente que me sigue nunca me ha dejado solo en ninguna actividad, cosa que valoro y agradezco. Intento tener una relación cercana con la gente que sigue mi trabajo, respeto y me nutro de sus críticas y comentarios, y trato de responder sus preguntas siempre que puedo. La contingencia obligó a que este lanzamiento haya tenido que ser virtual, pero el lado positivo es que pudo verlo gente de otros países, así que también tuvo sus ventajas.

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