La investigadora estadounidense Diana Taylor es fundadora del Instituto Hemisférico de Performance y Política de la Universidad de Nueva York (NYU), único en su tipo. Ha publicado de múltiples libros sobre performance, incluyendo varios en español como Performance (2012); y El archivo y el repertorio (2015). Es coeditora de Estudios avanzados de Performance. Traducida por Ana Stevenson, la publicación de ediciones UAH se lanzará próximamente. Esto es lo que conversamos con la autora.

–¿Qué te motivó a escribir  ¡Presente! La política de la presencia? 

-Comenzó con el tema de los inmigrantes centroamericanos y mexicanos en los Estados Unidos , yo estaba en el jurado del tribunal permanente de los pueblos, estaba oyendo historias tan fuertes que se me impuso una obligación ética de hacer algo. Este libro es un paso en el sentido de la responsabilidad sobre el presente en América. Hay cierta urgencia en mi libro porque hay muchas cosas que tenemos que intervenir: crisis social, crisis médica, crisis de inmigrantes, entre otras. Es una invitación a que todos podemos intervenir desde nuestras propias áreas, es por eso que menciono el arte, por ejemplo. Lo importante es cómo la gente reacciona. Uno interviene en los campos que uno puede, sin saber las repercusiones.

-En el libro presentas el conocimiento como un hacer, un saber comprometido, un proceso de estar, caminar, hablar y escuchar a los demás, con todas las complicaciones y responsabilidades que eso conlleva. ¿Podrías profundizar sobre esta mirada del conocimiento?

-Hay muchas formas de construir el conocimiento, pero en casi todos los países se educa de manera occidental. Es decir, nos educan con la idea de que el conocimiento viene de ciertas fuentes y tradiciones, pero no nos damos cuenta que es una imposición occidental. El trabajo ahora es el de descolonizar el conocimiento y, en ese sentido, la idea de conocimiento como un hacer en el presente puede ayudar a tener una conciencia más amplia.

Yo tengo muchísimo optimismo con las generaciones jóvenes, mis estudiantes están en un sitio que a mi me costó mucho llegar. Por ejemplo los conceptos de raza, sexualidad, género, no tienen esos prejuicios, son más coherentes y menos cerrados. No aceptan lo determinado sino que van más allá. Como por ejemplo, en las manifestaciones chilenas que luchan contra el sistema patriarcal.

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-¿Podrías profundizar en el concepto del libro, el estar presente? 

-Es la afirmación de un concepto que se ha utilizado muchísimo en Latinoamérica. Cuando en actos de resistencia ocupamos la palabra presente estamos afirmando la centralidad de ser testigos o de dar constancia de estas poblaciones que han sido desaparecidas o asesinadas, como el caso de las mujeres que menciono de Guatemala. Otra parte es la institucional; en la escuela te llaman y dices: ¡presente! El rango de significados de todas esas maneras de estar presente creo que hay que pensarlas juntas como una declaración de guerra, una afirmación, un compromiso a atestiguar, a estar presente como testigo.

-¿Cómo este concepto se relaciona a la actualidad? 

-El concepto ¡Presente! se relaciona en la actualidad a estar conectados con la realidad. Tenemos que ser parte de lo que está pasando en este minuto, entender que tenemos una responsabilidad de poder hacer todo lo que está en nuestras manos para generar cambios, eso es lo que significa estar ¡Presente!, por supuesto, siempre considerando al otro.

-Usas el concepto en diversas temáticas, siempre en el entendido que no dejar que todo pase ante los ojos sin conmoverse, sin actuar de un modo u otro. Respecto a la crisis de la migración, ¿has tenido la oportunidad de examinar el caso en Chile? 

-La migración es un fenómeno que se está dando en todo el mundo, cada país tiene tensiones. Para mí lo mejor que ha pasado en Chile es que lleguen inmigrantes, ya que crean una cultura mucho más interesante. En ese sentido, la migración nos puede dar una lección importante. También se ha producido migración de personas por problemas medioambientales. Acá todos los países son responsables de la devastación, por lo tanto todos deberían tomar medidas al respecto.