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Durante el evento «Los G10 de la Economía y Filosofía» que tuvo lugar en Amsterdam en septiembre estuvo invitado Slavoj Žižek, considerado por algunos el filósofo más peligroso del siglo XXI. Conocido por su estilo provocador e iconoclasta, es aborrecido tanto por los intelectuales de derecha, que le reprochan ser todavía marxista, como por los marxistas dogmáticos, que lo consideran un hereje, pero sobre todo por los intelectuales posmodernos, que postulan que la ideología ya no existe.
En la sección La Caja de Pandora del evento de Amsterdam, el filósofo esloveno tuvo dos apariciones: la charla «Hegel en un cerebro conectado» y la conversación «¿Ha muerto la filosofía?»
En su primera conferencia, Žižek debía hablar de Hegel visto desde el punto de vista de la informática e inteligencia artificial, pero en su lugar hizo un extenso recorrido por temas queridos y recurrentes en sus escritos, entrevistas y películas. Siguiendo un sinuoso y amplio discurso que tenía a Hegel como pretexto, habló del idealismo; el papel inspirador de Kant en la filosofía; Descartes como padre –junto a Espinoza– del pensamiento moderno y la Iluminación; y del el idealismo alemán de Hegel y Fichte, como fuentes del pensamiento marxista. Aquí parte de sus dichos:
Se habla de “política emancipatoria”: los políticos son todos corruptos y debemos crear nuestros grupos de pensamiento afín y dejemos la política a los políticos. La primera tarea debe ser emancipar la política misma, no es que haya mucha política, no tenemos suficiente.
El capitalismo hoy ha asumido la ideología del posmodernismo. El jefe ya no se presenta como un jefe, sino como agente que organiza el trabajo y quienes trabajan y son explotados por él son vistos como emprendedores que le prestan servicio: la relación de explotación queda oculta. Por otra parte, los dueños de las megacompañías se presentan como benefactores y lanzan campañas de beneficencia y caridad.
Soros gana millones por la mañana haciendo especulaciones financieras que significan la ruina de empresas que caen fuera del sistema. Por la tarde invierte parte de esas ganancias en algún programa de caridad alabado por todos. Bill Gates, con su fundación de apoyo a niños con pocas chances, vende una imagen de benefactor, mientras a través de su control de buena parte de la infraestructura informática mundial, no tolera competencia alguna.
Ideología es la manera equivocada de escapar de la realidad ya que creas la fantasía de que te has liberado de ella, cuando estás asumiendo los mismos valores. La ideología está presente en todo pensamiento actual, en especial de aquellos que se consideran que no tienen o creen en la ideología: esa es justamente una forma oculta y peligrosa de ideología.
El populismo puede asumir dos caras: de derecha, que cree que debe reprimirse todo aquello ajeno a la tradición imperante y piden un gobierno firme, al tiempo que cultivan teorías de conspiración para explicar el poder. Y por otro lado, el populismo de izquierda, que exige acceso inmediato al poder con soluciones simples e inviables, justificando cualquier forma de violencia y negando la necesidad de una organización política que sea capaz de hacer cambios necesario y organizar la burocracia que haga una país funcione.
Hay un problema mucho más urgente, que afecta al planeta entero: la crisis climática está a un paso de ser irreversible. Se requiere una acción global, de todos los gobiernos y organizaciones, porque si no ya es una catástrofe sin remedio.
Pero el gran capital usa este miedo a la catástrofe ecológica como una manera de legitimarse y conseguir que su papel en la destrucción del globo quede oculto. En lugar de unificar esfuerzos en una solución global, las corporaciones capitalistas “verdes”, dicen: usted tiene que actuar, usted es el responsable de consumir productos dañinos al ambiente y para ello le damos la opción de favorecer nuestras cadenas de producción que respetan la ecología, y fomentan el consumo creando líneas de productos supuestamente ecológicos que terminan haciendo fracasar los productores fuera de Occidente o imponiendo precios abusivos.
Al plantear qué alternativas hay para salir de la crisis ecológica y sanitaria, dijo: creo que esta crisis global no puede ser resuelta por los actuales gobiernos, no abogo por un gobierno mundial, pero se requiere un enfoque global.
¿Hay algún gobierno con el que me identifique para llegar a una solución? Si, el de Bolivia: el presidente hoy es Lucho Arce, el cerebro económico durante el gobierno de Evo Morales, consiguió un inmenso progreso económico sin arruinar la economía, como en Cuba y Venezuela. En Kosovo, un movimiento salido de la nada, de organizaciones sociales y de base consiguió formar un gobierno bajo control popular.
Slavoj Žižek, filósofo, político, escritor, activista y cinéfilo, es considerado un provocador profesional, desde que se hizo conocido por su libro El objeto sublime de la ideología en 1989, donde se aparta de la teoría tradicional marxista, mezclando el psicoanálisis de Lacan con el idealismo de Hegel.
El filósofo, nacido en Eslovenia en 1949, entonces parte de la Yugoslavia de Tito, estudió filosofía y psicología en en la Universidad de Ljubljana, para luego interesarse en psicoanálisis, filósofos Heideggerianos y estructuralistas franceses. Planteó una interpretación psicoanalítica lacaniana de la filosofía hegeliana y marxista, siendo aún miembro de las Juventudes Comunistas eslovena, a la que renunció en el movimento antiestalinista de 1988, participando en movimientos de derechos humanos, sin por eso dejar de considerarse comunista y marxista.
Conocido por su estilo provocador e iconoclasta, es aborrecido tanto por los intelectuales de derecha, que le reprochan ser todavía marxista, a los marxistas dogmáticos, que lo consideran un hereje, pero sobre todo los multiculturales, que creen que la ideología ya no existe. Su estilo extrovertido y actitud provocadora y agresiva al poder han llegado a clasificarlo como “el más peligroso filósofo de occidente”.
Su investigación en filosofía no deja de lado su interés en cine y cultura popular, con escritos de teoría del cine y participación en dos documentales: La guía perversa del cine y La guía perversa a la ideología. Su lista de publicaciones es extensa, cerca de 60 libros, de los que podemos citar títulos como La metástasis del goce: ensayos sobre mujeres y causalidad, El fantasma aún ronda (150 aniversario del manifiesto Comunista), El muñeco y el enano: el perverso núcleo del cristianismo, Problemas en el paraíso: del fin de la historia al fin del capitalismo, Como un ladrón a pleno día: el poder en la era de anti-humanidad, Hegel en un cerebro interconectado, Pandemia. Frecuentemente utiliza citas de escenas de cine, cómics y cultura popular para ilustrar alguna idea.
