Todo era mentira: Reportaje niega que Pablo Oporto haya matado a 12 delincuentes en legítima defensa

Un contundente reportaje finalmente desmintió el crudo relato de Pablo Oporto, dueño de un local comercial que aseguró haber matado a 12 delincuentes con su arma de fuego en legítima defensa.

El hombre, que se paseó por matinales y debates presidenciales, inventó prácticamente toda la historia, según relata el periodista Rodrigo Fluxá en su trabajo titulado «El Justiciero Imaginario», publicado por Revista Sábado.

Allí recuerdan cuando en el programa «Aquí está Chile», la conductora Mónica Rincón encaró a Oporto con la candidata presidencial del Frente Amplio, Beatriz Sánchez, e incluso se puso a llorar mientras relataba su historia.

Sin embargo, lo cierto es que en los registros de la Fiscalía Sur no aparece ningún asesinato asociado los asaltos que sufrió su negocio. Tampoco en la Subsecretaría de Prevención del Delito aparece su nombre en el programa de apoyo a víctimas.

Es más, su local solo fue víctima de asaltos en solo tres ocasiones: 2007, 2008 y 2013. Esta última fue la que apareció en televisión cuando logró repeler a los asaltantes con su arma de fuego.

A pesar de que le dio en el estómago a uno de ellos, un menor identificado como E. Tolosa Velásquez, el joven no murió y declaró a la publicación que «el viejo no nos dio tiempo de nada. Me pegó un balazo en la guata y corrimos». Jamás pagó el funeral como había asegurado.

El menor fue detenido por Carabineros y trasladado al Hospital Barros Luco donde finalmente se recuperó. «Después de la recuperación estuve dos años en un centro del Sename cumpliendo condena. Ahora lo veo en la tele. Lo he visto en el diario, diciendo no sé qué, que se creía Batman. Está mal del mate«, señaló Tolosa.

Vecinos tampoco concuerdan con la versión de Oporto y su propia ex esposa, Camila Pereira, sostuvo que «siempre ha sido bueno para inventar historias».

Para ella, lo único que es verdad son las peleas clandestinas de perros y relató crudamente que una vez «se le escapó una perra y se cruzó con un quiltro. Como él cruzaba los perros con otros que eran de la misma raza, en vez de regalar los perritos, los mató. Les aplastó el cráneo con el pie en el patio del local«.

Su relato concuerda con los archivos que maneja la Fiscalía Sur. Entre sus antecedentes destaca una condena por maltrato animal, sino también ha sido imputado por porte ilegal de armas y violencia intrafamiliar.

El periodista Rodrigo Fluxá logró contactarse finalmente con el hombre, quien sorprendentemente se sintió «aliviado» de enterarse que no había matado a nadie.