Día del Orgullo LGBTIQ+ en pandemia: Organizaciones refuerzan reivindicaciones y marchas virtuales

La pandemia de coronavirus ha obligado a la comunidad LGBTIQ+ a cancelar las marchas y fiestas del Orgullo, pero no a dejar de lado sus reivindicciones de igualdad que este año ha defendido en Internet y en alguna que otra pequeña manifestación.

Internet ha sido el lugar donde se ha celebrado este fin de semana la global Pride 2020 con un concierto desde casa en el que han participado artistas como Elton John , o el «Can’t Cancel Pride» (no pueden cancelar el orgullo) en el que actuaron, entre otros, Ricky Martin y Katy Perry, o el Orgullo Dentro, que ofrece charlas y otras actividades hasta el 5 de julio.

Y en cada país se están celebrando conferencias y debates virtuales, sobre las particulares reivindicaciones del colectivo.

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Así en Bélgica, uno de los pocos países que si celebrará el Orgullo en el formato tradicional, pero en agosto, se están organizando, desde ahora y hasta ese mes, debates influidos por la preocupación de la sanidad provocada por la pandemia.

«Este año, el Festival del Orgullo belga estará dedicado a la salud mental y física», dijo en un comunicado la asociación The Belgian Pride, que coorganiza el evento junto con otros colectivos LGBTIQ+ (lesbianas, gays, bisexuales, transgénero e intersexuales). «Queremos llamar la atención sobre los muchos desafíos que tienen que ser abordados, como la prevención del VIH y la accesibilidad a los servicios de salud para las personas transgénero», agregó.

En México, un llamado Comité Incluye T, ha organizado un evento virtual retransmitido este fin de semana en Youtube, Facebook y por el Canal Once de la televisión mexicana, que incluyó cápsulas informativas, charlas y múltiples expresiones artísticas, bajo el lema #ElOrgulloPermanece.

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En Italia, la reivindicación de este año es muy concreta: una ley efectiva contra la homofobia. Esta semana se prevé que la Cámara de los Diputados empiece a estudiar un proyecto de ley contra la homofobia, impulsado por el parlamentario Alessandro Zan, del Partido Demócrata (PD, centroizquierda), una de las fuerzas del Gobierno de coalición.

El objetivo es reforzar una ley ya existente que, desde 1993, castiga los delitos de odio por razones de raza, étnicas, religiosas o vinculados a la nacionalidad, incluyendo la «discriminación basada en la orientación sexual, identidad de género» o la misoginia, que serán penados con hasta cuatro años de cárcel.

También hubo una manifestación presencial en Londres, donde, a pesar de que el desfile principal previsto para hoy se ha suspendido, un grupo de personas se congregó en una manifestación que enlazó las reivindicaciones del colectivo gay con el de las recientes protestas contra el racismo, y marcharon bajo el lema: «Las vidas de las personas trans negras importan».

En Barcelona también se ha recordado una manifestación histórica, la primera que tuvo lugar en España para reivindicar los derechos de los homosexuales. Cientos de personas recorrieron el sábado el centro de Barcelona para conmemorar esa primera manifestación celebrada hace 44 años, meses después de la muerte del dictador Francisco Franco.

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Por su parte, en Moscú también penden banderas arcoiris de dos edificios oficiales, pero no del Gobierno ruso, sino de las Embajadas de Estados Unidos y del Reino Unido que así han actuado en solidaridad con una comunidad que no goza de libertades en ese país.

En Sudamérica, Chile tampoco se queda atrás. Con la cancelación de la marcha por la cuarentena total, varias agrupaciones tendrán a Internet como aliado. Salvo la Fundación Iguales, que obtuvo permisos para realizar una actividad en Plaza Italia, el resto decidió hacerlo de manera virtual para evitar críticas y descartar peligros de contagio.

Y finalmente en Argentina, donde la situación epidemiológica es más grave, se ha recurrido a iluminar los principales monumentos del país, como el Obelisco de Buenos Aires, la Floralis Genérica, el Planetario capitalino, y la Torre Monumental, con los colores de la bandera LGBTIQ+.