Un estudio realizado por organizaciones y entregado al Ministerio de Medio Ambiente propone medidas regulatorias que, de implementarse, lograrían en 10 años reducir en casi 3 millones las toneladas de envases plásticos que se desechan en el país.
El documento contiene una propuesta regulatoria que se basa en tres pilares:
Reducir envases
El primer pilar busca establecer metas concretas para reducir la producción de envases y embalajes de un solo uso.
Esto se traduciría en exigir que los productores reduzcan el total de envases introducidos al mercado, ya sea con esquemas de reúso o eliminando los “envases superfluos”, que facilitan la distribución pero no son estrictamente necesarios.
Reúso en puntos de venta
Otro pilar regulatorio es exigir a los comercializadores implementar modelos de reúso de envases en los puntos de venta.
Estas exigencias regirían para comercios que superan cierta superficie y que venden productos de las categorías más relevantes de envases domiciliarios: alimentos y bebidas, higiene personal y aseo del hogar.
El objetivo es que los comercios destinen una parte de su superficie para que los productores puedan implementar esquemas de reúso de envases. Esto implica que los usuarios puedan ir a devolver envases o rellenarlos.
Eliminar barreras innecesarias
El tercer pilar es eliminar algunas barreras regulatorias que impiden reutilizar envases.
Esto implica medidas como habilitar la venta a granel de los productos que puedan venderse así, admitir expresamente que los consumidores puedan comprar los bienes con sus propios envases.
También propone analizar y eliminar algunos decretos de los ministerios de Agricultura y Salud, que restringen la venta a granel de algunos productos como cosméticos o alimentos para mascotas.
La propuesta fue elaborada por la organización de conservación marina Oceana, la empresa de reutilización Algramo y la Asociación Nacional de la Industria de Reciclaje (ANIR).