Mucha preocupación causaron las palabras de Jaime García, DT que cumplió una histórica campaña con Ñublense de Chillán, en medio de su batalla contra el COVID-19 que casi le costó la vida.
Internado e intubado por meses durante ese terrible año 2020, el técnico se recuperó y no sólo regresó al elenco del Ñuble a la Primera División, sino que los hizo pelear el título y clasificar a Copa Libertadores.
Pero el 2023 todo eso quedó atrás y luego de una mala campaña, decidió renunciar a Ñublense. Sin club, fue postulado a los tres grandes de Santiago e incluso a la Selección Chilena, pero todo eso quedó en nada.
“No quiero hablar con nadie. Estoy con pena, me siento mal y desilusionado. Estoy dedicado a mi madre y nada más. Me ha servido mucho. Estoy en un proceso de tranquilidad, no estoy preocupado del fútbol”, comenzó.
“Me arranqué un poco de todo porque quiero tener paz, tranquilidad. No quiero aparecer en la prensa tampoco. Estoy desilusionado de eso. Estoy feliz con mi mamá. La vida me puso a mi madre, para cuidarla”, añadió, en diálogo con La Tercera.
Para cerrar, Jaime García dijo que “si todos se preguntan el por qué estoy sin trabajo, yo también. Las estadísticas hablan. De lo que hablan los demás no me puedo hacer cargo. El fútbol es difícil. Ser técnico es difícil y verdad hay una sola. Soy un técnico que ha respetado a todos. Soy de una línea y la respeto. He hecho las cosas bien, super bien».