La inflación en Chile marcó un alza de 0,9 % en junio, un incremento poco menor al esperado por el mercado e impulsado por alzas de transporte, alimentos y bebidas no alcohólicas, informó este viernes el Instituto Nacional de Estadísticas (INE).
Según el organismo, el Índice de Precios al Consumidor (IPC) acumula 7,1 % en lo que va de año, y 12,5% en 12 meses, de los máximos niveles desde 1994.
«Sigue siendo una cifra alta, pero es importante destacar que es la primera vez en muchos meses que sorprende a la baja (…) por otro lado, es el tercer IPC a la baja en la variación mensual después del peak de marzo (…) Esto nos dice por lo menos en cuanto a la persistencia de estos shocks puede ser alto menor», señaló el ministro de Hacienda, Mario Marcel.
Y explicó, que «hay elementos de dulce y agraz», siendo lo negativo «el aumento del costo de la vida como el alza de alimentos».
Posteriormente, aseguró que el gobierno trabaja en medidas para contener la presión en el bolsillo de las familias chilenas.
Por su parte, el INE indicó a través de un comunicado que «siete de las 12 divisiones que conforman la canasta del IPC aportaron incidencias positivas en la variación mensual del índice, cuatro presentaron incidencias negativas y una registró nula incidencia».
El área de transporte fijó aumentos mensuales en ocho de sus 10 categorías, siendo la más importante el transporte de pasajeros por aire con 13,4%, mientras que combustibles y lubricantes para vehículos de transporte personal marcó un alza de 4%.
Los alimentos y bebidas no alcohólicas marcaron alzas mensuales en nueve de sus 11 categorías, siendo la más relevante los incrementos en el pan y cereales, que llegaron al 3,1 %.
«De los 76 productos que componen la división (de alimentos), 49 consignaron alzas en sus precios, destacando pan (3,5%), seguido de carne de pollo (4,2%)», consignó la institución.
Chile cerró 2021 con una inflación que alcanzó el 7,2 %, la más alta en 14 años, lo que llevó al Banco Central a tomar medidas inéditas y retirar rápidamente el estímulo monetario que aplicó con el inicio de la pandemia, en marzo de 2020.
En junio, el Banco Central aumentó en 75 puntos base la Tasa de Política Monetaria para llevarla a 9%, su valor más alto en dos décadas, en un intento por frenar la escalada de los precios internos.
Las ayudas fiscales para paliar el impacto de la pandemia y los tres retiros anticipados de los fondos de pensiones aprobados por el Congreso desataron el consumo.
Las estimaciones de crecimiento del PIB chileno para este año, según el ente emisor, se ubican en un rango de entre e 1% y 2%, frente al 1,5 % y 2,5 % que tenía pronosticado, y alertó de un riesgo de recesión para 2023.