El Departamento de Estudios de la Cámara Nacional de Comercio (CNC), oficializó este jueves su Índice Mensual de Ventas correspondiente a la Región Metropolitana, confirmando que 2022 las cifras del sector evidenciaron una baja considerable.
Respecto del detalle publicado en redes sociales de la entidad, «las ventas presenciales minoristas de la Región Metropolitana marcaron en diciembre una baja de 18,4% real anual, tras caer 23,4% en noviembre y marcando de esta manera seis meses de caídas».
Como consecuencia de este comportamiento del mercado, el 2022 cerró con una baja de 7,8%, casi equivalente a las proyecciones (8%) de la CNC, mientras que «en términos de locales equivalentes, el indicador marcó en el último mes del año un descenso de 16,4% real anual, acumulando en el período enero-diciembre de 2022 una baja de 6,4% real.
Adicionalmente, el último trimestre del año registró una caída de 20,2%, en línea con los trimestres móviles precedentes.
«Todas las categorías marcan fuertes bajas de dos dígitos frente a diciembre de 2021 y frente a diciembre de 2019 (afectado en parte por el estallido social), solo vestuario crece fuertemente, mientras que los demás rubros marcan caídas de distinta magnitud», certifica el informe de la CNC.
Paralelamente, la entidad reporta que «las ventas presenciales del retail en la RM vuelven a caer en diciembre respecto a igual mes del año pasado, cerrando así el segundo semestre del 2022 con una baja de 20,8%, tras crecer un 11,4% en el primero».
«Recuperar la inversión es el gran tema país»
El detalle del desglose, apunta a que «el indicador marcó en todos los meses del segundo semestre del año pasado, caídas reales anuales en torno al 20%, bajas influidas en gran parte por la alta base de comparación enfrentada, alzas históricas que vimos en la segunda mitad del año pasado por el fuerte aumento de liquidez producto de los retiros y ayudas fiscales».
En consecuencia, el indicador cerró el 2022 con una baja de 7,8% en relación al año anterior, donde en los últimos meses se acentuó más la desaceleración del consumo, a causa de un menor poder adquisitivo y la mermada confianza de los consumidores.
Comparando con el 2019, de hecho, se evidencia un nulo crecimiento, respaldado por la categoría vestuario, la única que creció de manera relevante, mientras que el resto registra bajas de diversa magnitud.
«Entramos al 2023 bajo un escenario de alta incertidumbre, tanto nacional como internacional. Sabemos que la economía del país se contraerá y para el sector comercio estimamos una baja entre 3% y 6%. Recuperar la inversión es el gran tema país y con esto, la reactivación del mercado laboral, el cual se ha estancado y ha visto un mayor impulso en los ocupados informales», declara la CNC en virtud del complejo momento económico por el que transita nuestro país.