Mario Abdo Benítez, presidente de Paraguay | Foto: @PresidenciaPy
«Vengo a anunciarles, en nombre del presidente, que él ha escuchado a la ciudadanía. Llama a la paz, a la calma entre los paraguayos, respeta a las manifestaciones pacíficas. En ese sentido, hoy convocó a su gabinete y ha pedido a todos sus miembros que pongan sus cargos a disposición», anunció este sábado Juan Manuel Brunetti, ministro de Tecnologías de la Información y Comunicación.
El presidente de Paraguay, Mario Abdo Benítez, pidió a todos los ministros de su gobierno que pongan sus cargos a disposición y se comprometió a «escuchar» a la ciudadanía tras las masivas protestas del viernes que se saldaron con al menos 21 heridos.
El ministro de Tecnologías de la Información y Comunicación, Juan Manuel Brunetti, explicó la decisión adoptada por Abdo Benítez, en medio de una reunión en la Mburuvicha Róga, sede oficial de la Presidencia, para tratar la situación.
«Vengo a anunciarles, en nombre del Presidente, que él ha escuchado a la ciudadanía. Llama a la paz, a la calma entre los paraguayos, respeta a las manifestaciones pacíficas. En ese sentido, hoy convocó a su gabinete y ha pedido a todos sus miembros que pongan sus cargos a disposición», explicó Brunetti en declaraciones recogidas por el diario paraguayo ABC Color.
Brunetti anunció además una rueda de prensa de Abdo Benítez para informar sobre los cambios dentro de su gabinete. El ministro destacó que el presidente consideró la reacción ciudadana y las protestas para tomar la decisión de exigir a sus ministros que pongan sus cargos a disposición.
«Oportunamente, en el día de hoy va a hablar con la ciudadanía, va a anunciar los cambios. Lo que queremos es que sepan que el mensaje de la ciudadanía llegó al Presidente», dijo.
Al menos 21 personas han resultado heridas este en la movilización del viernes contra el gobierno de Paraguay en protesta por corrupción y por la gestión del sistema sanitario, con profesionales de la salud reclamando suministros para poder hacer frente a la pandemia. La compleja contingencia incluso ha motivado la convocatoria a nuevas movilizaciones para este fin de semana.
El ministro del Interior, Arnaldo Giuzzio, dijo este viernes tras los incidentes que la violencia fue provocada por un grupo de «infiltrados» que no formaba parte de los manifestantes.
Ya este sábado, Giuzzio anunció que la Asesoría Jurídica de la Policía y del Ministerio Público van a presentar una imputación penal contra infiltrados. «(En) el informe que recibimos se vio perfectamente que un grupo se estaba manifestando, saltando y en un momento dado se dio una orden y comenzó el disturbio. La manifestación era absolutamente pacífica», dijo al tiempo que apuntó a «barras bravas» e hinchas de fútbol por los disturbios.
Giuzzio aseguró además que el presidente Abdo Benítez «quiere paz», y más en tiempo de pandemia, por lo que «desde el viernes se pidió a la Policía ir a la marcha sin armas, no se ordenó la represión».
«El Presidente acepta y es consciente de esta manifestación ciudadana. Eso hacen los demócratas. Él tiene hijos, tiene familia y no quiere conflictos y menos en época de pandemia. El Presidente, a pesar de su pasado stronista es uno de los mayores demócratas. Él tiene en su gabinete gente que no es colorada», subrayó.
Mientras, desde la oposición pidieron la dimisión del mandatario y del vicepresidente Hugo Velázquez y advirtieron que, de lo contrario, impulsarán un juicio político. Paralelamente, emplazaron a la población a continuar con las movilizaciones y han rechazado cualquier posibilidad de negociar con el oficialismo.
«Se tienen que ir, el presidente y el vicepresidente se tienen que ir. Estamos reunidos para ver un plan de trabajo. Hemos pagado por vacunas que hoy no están», argumentó Efraín Alegre, del Partido Liberal, en relación a las denuncias de corrupción.
Por su parte, el representante del Frente Guazú, Carlos Filizzola, también respaldó el «legítimo derecho» a manifestarse y condenó la represión policial. «Instamos a la ciudadanía a que se sigan movilizando. Tienen que irse Mario Abdo y Hugo Velázquez», subrayó al tiempo que apostó a el presidente del Congreso, Óscar Salomón, asuma el liderazgo y convoque inmediatamente a elecciones.
En ese sentido, rechazó las dimisiones de ministros anunciadas por la Presidencia porque «un cambio de nombres no sirve, hay que cambiar el modelo».
El gobierno admitió recientemente que había escasez de medicamentos para tratar a pacientes de COVID-19 y que casi todas las camas de cuidados intensivos de los hospitales públicos estaban llenas. Ante esta situación, el ministro de Sanidad, Julio Mazzoleni, renunció este viernes.
Paraguay se encuentra atravesando los más altos índices de contagios de COVID-19, con más de 1.500 nuevos casos diarios y más de 300 pacientes ingresados en unidades de cuidados intensivos, por lo que el sistema sanitario se encuentra bajo una enorme presión. A nivel global, el país acumula 165.811 casos y 3.278 muertes desde el inicio de la pandemia.
