Este martes, fueron detenidos cuatro sujetos, «con tendencias neonazis», según declaró la Fiscalía, por secuestrar y torturar a un joven de su mismo grupo en Estación Central.
Los hechos ocurrieron el pasado 5 de junio, cuando, según la información entregada por el ente persecutor, la víctima le confesó a sus amigos que era homosexual.
Esto habría sido suficiente para que sus victimarios, entre ellos un menor de edad, lo amarraran por cinco horas, periodo en el que lo golpearon con puños y pies, y le pusieron corriente. Producto de estas agresiones, el joven quedó con lesiones de carácter grave y una fractura mandibular, provocada por el golpe de un bototo en su rostro.
De las personas detenidas, los tres mayores de edad, dos hombres y una mujer, quedaron en prisión preventiva, mientras que el menor de edad quedó con arresto domiciliario.
Movilh exige «la máxima sanción»
Desde el Movimiento de Integración y Liberación Homosexual (Movilh) en tanto, emitieron un comunicado en el que solicitan la intervención del Ministerio de Interior y anuncian una querella por estos hechos.
“Este es un hecho deleznable, sobrecogedor, merecedor del repudio de toda la sociedad y de la máxima sanción establecida en la legislación, considerando por cierto la agravante de la Ley Zamudio. Nadie puede ser atacado por su orientación sexual o identidad de género. Ello es inhumano. Estamos muy impactados por lo ocurrido”, señaló el vocero del Movilh, Oscar Rementería.
En ese sentido, Rementería añadió que “hoy hemos puesto a disposición del Ministerio del Interior todos los antecedentes del caso, de manera que el gobierno se haga parte presentando una querella, así como brindando a la víctima toda la asesoría legal y psicológica que necesite. Junto con solicitar intervención del gobierno, presentaremos una querella”.