Después de 15 meses: Absuelven a pololos de 19 años acusados de porte de bomba molotov

El Tribunal de Juicio Oral en lo Penal de Iquique absolvió este viernes a dos jóvenes pololos acusados de portar bombas molotov, además de robo en lugar no habitado en el contexto del estallido social. Los hechos habrían ocurrido en noviembre de 2019.

En fallo unánime, el tribunal decretó la absolución de Cathalina Martínez y Nicolás Cáceres, tras establecer la insuficiencia de las pruebas rendidas en estrado para configurar los delitos imputados.

Al momento de su arresto, la pareja de jóvenes tenía 19 años, y eran estudiantes. Después de su detención, pasaron cuatro meses en la Cárcel de Alto Hospicio, para después estar bajo arresto domiciliario.

“La diversa evidencia generada, testimonial, pericial, video y fotografías, junto a un documento incorporado, como se señaló en el veredicto, no tuvo la eficacia necesaria para demostrar los hechos atribuidos a los acusados, en aquello que es relevante al tipo penal, correspondiente al transporte de un artefacto incendiario, y a una conducta destinada a apropiarse con ánimo de lucro de una especie mueble ajena”, sostiene el fallo.

Así, concluye que “como se aprecia, el panorama probatorio que acaba de reseñarse aparece muy distante del convencimiento necesario para decidir la condena de los acusados, puesto que las pruebas de cargo allegadas al juicio con dicha finalidad resultan insuficientes para superar el estándar de la duda razonable que exige el artículo 340 del Código Procesal Penal, lo que obliga entonces a absolverlos de los cargos dirigidos en su contra”.

Los abogados de la Defensoría Penal Pública Regional de Tarapacá, quienes representaron a los jóvenes, lograron bajar la cautelar de los pololos en marzo del año pasado. De esta forma, pasaron de estar en prisión preventiva a arresto domiciliario total.

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Según recoge Cooperativa, los defensores penales públicos Andrés Hidalgo y Aliny Garcés, representantes de Cáceres y Martínez respectivamente, se mostraron satisfechos por el fallo. Durante el juicio, subrayaron que los jóvenes siempre mantuvieron una “única y coherente” versión de los hechos. Además, destacaron que cooperaron con las autoridades desde el primer momento de la investigación.

“Lo dicho por los jueces demuestra que nuestra teoría del caso estaba correcta. También que los elementos que portaban y la conducta que desarrollaron antes de su detención no cumplían las condiciones para considerarse como ilícitos”, destacó  Hidalgo.

Para Garcés “fue una causa compleja, no sólo por los delitos por los que eran acusados y la penalidad asociada, sino también por el contexto social en el cual se insertó. Como lo pedíamos, se descartó que se tratara de elementos incendiarios, no obstante que lo pareciera y a pesar del contexto de protesta en el que se verificaron los hechos, todo lo cual fue recogido en la sentencia”.