Este jueves 22 de junio, el sargento primero de Carabineros, César Orellana, fue condenado por homicidio simple en calidad de frustrado en contra de Vicente Hernández, en el contexto del estallido social.
El joven fue impactado en su cráneo con una bomba lacrimógena, disparada por el funcionario policial el pasado 18 de noviembre de 2019.
Producto del ataque, Hernández sufrió un politraumatismo con un TEC complicado, a raíz del hundimiento y contusión en la parte parietal izquierda de su cabeza; de hecho consultados por El Desconcierto, los profesionales que atendieron al joven en 2019 informaron que tuvo riesgo vital.
A casi cuatro años de los hechos, el abogado de la familia Hernández, Yuri Santander Vásquez, explicó que durante la jornada de ayer se leyó el veredicto que define la culpabilidad o inocencia de Orellana y el delito por el cual fue imputado.
Sin embargo, aún no se ha oficializado la cantidad de años que enfrentará el funcionario policial. Al respecto, Santander explicó a este medio que en principio la familia del afectado solicitó ocho años de presidio, pero «como no se reconoció la agravante de prevalerse de su calidad de funcionario público, solicitamos siete años de cárcel efectiva«.
Paralelamente, el abogado confirmó que la familia se encuentra satisfecha con el fallo, pero que aún deben esperar la cantidad de años a los que será sentenciado el sargento primero, César Orellana, el próximo 30 de junio.
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