La Región de Valparaíso ha registrado una serie de varios incendios forestales este fin de semana, contingencia que ha dejado al menos 800 hectáreas calcinadas y siete personas heridas fuera de riesgo vital, según informó la delegada presidencial de la zona, Sofía González, en horas de la tarde de este domingo.
Sólo este sábado se registraron 11 siniestros que afectaron un total de 20 viviendas, mientras que una de ellas resultó con pérdida total, detalló la autoridad regional.
La zona central de nuestro país enfrenta una de las primeras olas de calor a las puertas del verano, con temperaturas extremas que superan los 35°C, según la Dirección Meteorológica de Chile (DMC).
𝗔𝗠𝗣𝗟𝗜𝗔𝗖𝗜𝗢𝗡 | Imágenes del incendio forestal de #Limache sector «Cajón de Lebu» pic.twitter.com/xVx9hxxa8T
— Bomberos de Chile (@BomberosdeChile) December 9, 2023
Anuncian querella contra detenido
Respecto de la intencionalidad de los incendios de las últimas horas, hasta esta jornada hay un detenido por uno de los siniestros de este fin de semana.
«Hemos sido muy claros en la decisión de interponer una querella criminal considerando el riesgo y el daño que le genera a nuestra región; prácticamente el 100% de los incendios en Valparaíso tienen alguna vinculación con el ser humano, sea por negligencia o por intencionalidad», comentó Gomzález.
El Servicio Nacional de Prevención y Respuesta ante Desastres (Senapred) determinó mantener este domingo la Alerta roja decretada en varias zonas de la región e informó que entre las comunas de Villa Alemana y Limache se evacuó a 374 personas, de las cuales 21 fueron albergadas.
Los incendios del verano pasado cobraron la vida de al menos 25 personas en nuestro país, a lo que se suman más de 400.000 hectáreas calcinadas en todo Chile, mientras que su intensidad fue particularmente se tradujo en una afectación mayor en la zona centro-sur, específicamente en las regiones del Ñuble, Biobío y La Araucanía.
El Presidente Gabriel Boric, en tanto, anunció un presupuesto de $148.000 millones para 2024 destinado a combatir los incendios del verano, lo que supone un aumento del 47 % respecto de la temporada anterior, que fue una de las más mortíferas de los últimos años.