Imagen referencial | Agencia Uno
Un brote que ya tiene a nueve personas confirmadas con COVID-19 denuncian los trabajadores de Ripley Parque Arauco, en la comuna de Las Condes. «Siempre hay más de 1.500 clientes en la tienda», enfatizaron los trabajadores, que llamaron a las autoridades de gobierno a no permitir las aglomeraciones que se han visto en distintos puntos de comercio en los últimos días.
Aglomeraciones en el Costanera Center, en el barrio Meiggs y probablemente en decenas de otros puntos alrededor de la capital han marcado la tónica de estos últimos días previos a la Navidad, situación que se suma a los los contagios diarios que han registrado peak que no se veían desde julio de este año.
Una de las consecuencias de esta situación es lo que actualmente viven los trabajadores y trabajadoras del Ripley del Mall Parque Arauco, donde en siete días se han contagiado nueve funcionarios y que siete de ellos, según detallan fuentes del sindicato, tuvieron contacto directo con los clientes.
Los casos comenzaron el martes 15, cuando se detectó el primer contagiado. Tras este, otras tres personas resultaron positivas en los días siguientes, y luego otras cinco. Todos se encuentran hoy en sus respectivas cuarentenas, no obstante que el resto de sus compañeros siguen ejerciendo normalmente sus labores.
Se trata de un total aproximado de 500 trabajadores que se desempeñan en la tienda, cuyo aforo se estima en unas 1.500 personas, y que en estos días previos a navidad, según detallan desde el sindicato, ha sobrepasado el máximo permitido.
La situación está en conocimiento tanto de las autoridades sanitarias como de Ripley, quienes se han puesto en contacto con los líderes sindicales y han señalado que están siguiendo todos los protocolos del caso. Aún así, los trabajadores se sienten preocupados.
«Siempre hay más de 1.500 (clientes) en la tienda«, expresó Gerardo Acuña, presidente del Sindicato Ripley Parque Arauco, advirtiendo que la situación puede escalar muy rápidamente.
Por ello, relata que han conversado con la Directora de Salud de la Municipalidad de las Condes y con funcionarios de la Seremi de Salud, consultándoles «cuántos trabajadores tiene que haber contagiados para que se haga algún tipo de fiscalización, exámenes preventivos, etc. Y siempre nos respondieron que 9 contagios era muy poco. Nosotros les recalcábamos que llevábamos ese número en una semana, pero no cambiaba nada», explicó.
Aún así, Acuña señaló que no cree que las personas contagiadas hayan tenido demasiado contacto con el público. «No creo que mucho, porque hay micas separadoras, están con mascarillas, hay alcohol gel, etc».
Asimismo, el dirigente relató que este martes Ripley les avisó que comenzará a realizar exámenes rápidos a todos los trabajadores de la tienda.
«Hacemos el llamado a que el Estado también se preocupe. Que no sólo los empresarios tengan todos los subsidios y beneficios, sino que la clase más desprotegida tenga la atención del Estado. Hoy día somos los que estamos dando al cara, como los funcionarios de la salud en primera línea, frente al cliente, frente a toda la ciudadanía que está saliendo a la calle desbordada a comprar, y el Estado está ausente», señaló el presidente del sindicato.
«Las respuestas que nos dan son vagas, uno quisiera ver a un Estado que se preocupara no sólo con pantallas y con cámaras, como lo hizo en el Mall Plaza Norte, sino que viera que en todos los malls están colapsados de gente, y uno es el que está dando la cara y corriendo el riesgo como trabajador», complementó.
Desde Ripley, en tanto, respondieron a nuestro medio negando la existencia de un brote en la tienda de Parque Arauco, dado que «durante la semana pasada los casos detectados, y los trabajadores que tuvieron contacto estrecho con ellos, dejaron de asistir inmediatamente a la tienda».
La empresa agregó que «todos quienes estuvieron en contacto con estos casos se realizaron exámenes PCR y se encuentran realizando cuarentena preventiva; las instalaciones fueron sanitizadas y la autoridad correspondiente fue notificada oportunamente».
Además, aseguraron que su protocolo «excede las exigencias sanitarias de la autoridad con medidas como el uso obligatorio de mascarilla, control de temperatura a clientes y trabajadores en la entrada, el ingreso controlado a la tienda y el uso de un software que nos permite saber en tiempo real cuántas personas hay al interior de cada local».
