Libertarios en Chile | Diseño: Simón Vallejo
En la última década, el movimiento libertario en Chile ha multiplicado sus exponentes y encontró un fuerte nicho en Youtube. Sus ideas radicales atraen especialmente a los jóvenes y, si bien no cuentan con un partido político propio, sí tienen amplias redes en la derecha y en el mundo empresarial.
—No, con esos hueones no.
A Fernando Claro, director ejecutivo de la Fundación para el Progreso (FPP), le acaban de avisar que un periodista de El Desconcierto quería hacerle algunas preguntas y su respuesta fue seca y tajante: “No, con esos hueones no”
—¿Y por qué no?— le pregunto.
—Porque me sorprendieron…
—¿“Con esos hueones no”?
—Mentira, no dije eso… Dije “dónde están”.
Estamos en el Teatro Municipal de Las Condes para recibir en Chile a David Friedman, el hijo de Milton, quien dictará una conferencia invitado justamente por la FPP. El lugar está prácticamente lleno.
—¿Cuál es la importancia de un evento de este tipo?— le pregunto a Claro, superando el impasse.
—Es importante porque tenemos dos personas de alto calibre conversando sobre los temas que están en boga en este país, que tienen que ver con la libertad individual de las personas.
Una de esas personas es Friedman, hijo de uno de los máximos referentes del neoliberalismo. El segundo es Axel Kaiser Barents-Von Hohenhagen (41), economista, presidente y fundador de la FPP. Según el ranking de El Mercurio, su libro «El economista callejero» ha sido el más vendido en Chile durante prácticamente todo el año.
Claro detalla que este tipo de eventos los hacen abiertos al público, pero que esencialmente llegan jóvenes entre 18 y 25 años. Además, explica que la fundación ha ampliado su alcance a ciudades como Valdivia, Concepción y Valparaíso. Esto la convierte en la principal organización libertaria del país.
Los antecedentes más antiguos del libertarismo se encuentran en el siglo XVII, cuando surge el movimiento de los Levellers en Inglaterra. En un contexto de cuestionamiento al absolutismo, ellos sientan las primeras bases para abolir la monarquía, y también producen el primer cuerpo de ideas que da sustento al individualismo político.
En ese sentido, los libertarios comparten historia y valores con el liberalismo clásico, especialmente en lo que refiere a libertad económica y la creencia de que el mercado es el mejor orden para la asignación de recursos.
Sin embargo, la separación entre ambas corrientes se dio a mediados del siglo XX, por el rol que le otorgan al Estado en la sociedad. Mientras los liberales apuntan a reforzar sus atribuciones en favor de la justicia social, los libertarios son escépticos y reniegan de ello.
Su doctrina se basa justamente en que la propiedad y los mercados libres son capaces de garantizar la libertad individual. En ese sentido, proponen la máxima limitación del Estado. Versiones más radicales, como el anarcocapitalismo, sugieren incluso su eliminación.
El investigador del Instituto de Estudios de la Sociedad (IES), Álvaro Vergara, enfatiza justamente que las ideas libertarias emergen como una oposición radical a ideas socialistas o keynesianas.
“Todos los pensadores libertarios fueron contrarios a otros autores de izquierda y muchos incluso elaboraron sus obras desde la oposición y destrucción de teorías. La mayoría de ellos fueron acérrimos rivales del socialismo y la planificación centralizada”, recalca.
Esta corriente de pensamiento se vio fuertemente influenciada por la escuela austríaca de economía, donde destacan autores como Friedrich Hayek y Murray Rothbard, quienes intentaron darle cuerpo a una teoría moderna de la «mano invisible» propuesta por Adam Smith.
La versión más contemporánea del libertarismo comenzó a tomar fuerza desde la crisis subprime de 2008. En el espectro político, se posicionan en la derecha, con quienes generalmente coinciden en materia económica.
En ese sector suelen formar alianzas con nacionalistas y conservadores, aunque se distinguen de ellos en temas valóricos, pues son partidarios del aborto libre, la adopción homoparental y la legalización de las drogas. Eso sí, aclaran que no lo hacen porque sean derechos, como se suele plantear desde el progresismo, sino porque son mercados desde los cuales se puede sacar rédito económico.
Históricamente, su símbolo es la bandera de Gadsden, popularizada en Estados Unidos durante la guerra de independencia. En ella aparece una serpiente con el lema: «Don’t Tread on me» (No pases sobre mí), en alusión a que el Estado no debería pasar por encima de sus ciudadanos. En términos identitarios, sus colores son el amarillo y el negro.
Bandera de Gadsden
En Chile es difícil rastrear su origen exacto, aunque se estima que su pensamiento comenzó a tomar fuerza hace por lo menos una década. Para Álvaro Vergara, saber cómo se mueve este movimiento en Chile es complicado ya que “no tienen una orgánica que los aglutine a todos”. Sin embargo, aclara que “es importante decir que en el libertarismo confluyen diversos espectros ideológicos”.
Si bien se pueden detectar nexos con la Fundación Jaime Guzmán, y Libertad y Desarrollo, el movimiento actualmente tiene dos polos donde se desarrolla su pensamiento de manera más genuina e intensiva: Fundación Para el Progreso (FPP) y Fundación Nueva Mente (FNM).
La primera cumple una década este año. En 2012 fue fundada de la mano de Nicolás Ibáñez. Ese vínculo con el empresariado se mantiene. De hecho, en su página web, aparecen en su directorio los nombres de Francisco Pérez Mackenna, gerente general de Quiñenco, matriz del grupo Luksic; y Dag von Appen, presidente de la Junta de Ultranav y director general de Ultramar Group of Companies.
Sus redes también se extienden en el mundo político. En su consejo directivo hay dos exministros de Sebastián Piñera: Gerardo Varela y Roberto Ampuero, ambos militantes de Evópoli. También están los exconvencionales Rocío Cantuarias y Martín Arrau, este último de la UDI.
Por otro lado, la Fundación Nueva Mente (FNM), fue fundada en el 2018 por la exsubsecretaria de Educación en la dictadura y militante UDI, Paulina Dittborn. Junto a ella destaca la exconvencional Teresa Marinovic, cercana al Partido Republicano, quien se desempeña como directora ejecutiva de la institución.
A diferencia de la FPP, que aspira a ser un faro más intelectual del mundo libertario, en la FNM tienen aspiraciones que apuntan más a la divulgación de ideas, especialmente a través de Youtube.
Descontando a los medios de comunicación, la mayoría de los canales de Youtube con más suscriptores en Chile dedicados a noticias y política, son de derecha. En este ecosistema conviven libertarios, patriotas y seguidores de teorías conspirativas, como Doctor File o Contracultura.
Los libertarios tienen varios exponentes entre los 15 primeros. Uno de ellos es el expanelista de Tolerancia Cero, Fernando Villegas, cuyo canal cuenta con más de 230 mil suscriptores y, entre todos sus videos, supera las 80 millones de reproducciones. Si bien Villegas no es un exponente nato del libertarismo, sí ha hecho comentarios apoyando a canales de esta tendencia.
Otro de los youtubers que destaca es el abogado Rodrigo Prefaneta, conocido como Paralelo 33, quien posee más de 180 mil suscriptores, y que ha dado el salto recientemente a programas de televisión como Sin Filtros.
El canal del diputado Johannes Kaiser, El Nacional-Libertario, también es conocido dentro del ambiente. El hermano de Axel cuenta con más de 116 mil suscriptores y sigue activo pese a las polémicas en materia de derechos humanos. Su hermana, Vanesa Kaiser, también tiene su espacio en la red con su canal Esfera Pública, que suma más de 48 mil seguidores.
El activista Sebastián Izquierdo mantiene activo su canal Seba Left 3, más conocido como Capitalismo Revolucionario, creado en 2016. Si bien solo tiene unos 46 mil suscriptores, su canal supera las 12 millones de reproducciones.
En esta lista también destaca En la mente de Rodrigo, dirigido por Rodrigo «Krypto» Pulgar, quien se dedica especialmente a la reflexión de cómics y hip-hop, pero también comparte comentarios de actualidad desde una óptica libertaria. En 2020, de hecho, causó revuelo tras aparecer en la franja del Rechazo en el plebiscito de entrada.
Álvaro Vergara subraya que “estos grupos son bastante comprometidos” con la divulgación de sus ideas. En esta red social comparten lecturas de actualidad y revisan autores para potenciar su doctrina.
Junto a ese amplio abanico de youtubers, los libertarios también tienen algunos medios enfocados en su pensamiento. Uno de ellos es la revista Átomo, ligada a la FPP, y la otra es Individuo, creada este año.
También existe un grupo que le da vida al Partido Libertario de Chile, que comparte información por Youtube, aunque no figura en los registros del Servel.
Los principales referentes internacionales del movimiento libertario se articularon en Estados Unidos en torno a la campaña de Donald Trump. En un principio formaban parte de la alt-right (derecha alternativa) que llevó al empresario a la presidencia.
Sin embargo, en ese ecosistema, los libertarios compartían con grupos neonazis y supremacistas blancos, con los que tuvieron serias diferencias doctrinarias. De hecho, terminaron quebrándose en 2017, durante el primer año de gobierno.
Entre ellos habían figuras que destacaron por su carácter provocador, especialmente en las redes sociales, como el estadounidense Milo Yiannopoulos o el británico Paul Joseph Watson.
En EE.UU. también surgió una especie de milicia armada libertaria, llamada Movimiento Boogaloo, cuyas acciones han inspirado a grupos chilenos como La Vanguardia.
En Latinoamérica, el auge de los libertarios se ha dado especialmente en Argentina. Javier Milei se ha convertido en su máximo referente. Actualmente es diputado y se perfila como un candidato presidencial competitivo para las próximas elecciones, rompiendo con el mito de que los libertarios no son capaces de dar el salto a la política.
En el mundo de las redes sociales, también destacan influencers como Agustín Laje, quien ha empujada a las derechas a dar una batalla cultural contra la izquierda y en articular un relato propio. También está Emmanuel Danann, quien posee 1,6 millones de seguidores en Youtube.
Recientemente, ambos estuvieron en medios chilenos. Mientras el primero fue invitado al programa Bad Boys, donde participa Franco Parisi, el segundo fue invitado a Sin Filtros de canal Vive.
