Tras el éxito de Unholy, hit que alcanzó la primera posición del Hot 100, Kim Petras adquirió visibilidad en la escena musical mundial, adquiriendo el título de Princesa del Brillo por el New York Times.
Pero, también representó un hito para la comunidad LGBTQ+ por tratarse de la primera mujer trans en llegar a la cima de la industria pop.
La artista y compositora nació en la ciudad alemana de Colonia, bajo el nombre de Tim, pero desde su niñez se identificó con el género opuesto. “Siempre me he sentido como una chica. A los cinco años odiaba mi cuerpo”, contó al semanario Die Zeit.
Gracias al apoyo de sus padres, Petras inició un tratamiento en un centro especializado en terapias hormonales de Hamburgo. Las inyecciones detuvieron la pubertad masculina, y las hormonas estimularon su transición hacia un cuerpo femenino.
A la edad de 15 años, la artista comenzó a publicar sus canciones en internet y hasta el momento ha colaborado con músicos como Charli XCX, Kygo, Paris Hilton y Dr. Luke; además de escribir algunas canciones para Fergie y Rihanna.
Pero su reciente éxito marca un hito para las diversidades sexuales y su visibilización, con audiencias que aún se resisten a verlas con total normalidad. Ello, porque Unholy debutó en el puesto #1 de la revista Billboard en Estados Unidos.
Tras el éxito de la canción que comparte con Sam Smith, Petras estaría trabajando en un nuevo álbum de estudio, después de lanzar Clarity en 2019 y su proyecto de Halloween, Turn Off The Light ese mismo año.
“Mi transexualidad me hace especial, pero quiero ser conocida por ser una buena artista”, concluyó en Die Ziet.