Sence es reconocida por su accesibilidad web para personas con discapacidad

Hace unos días el Servicio Nacional de la Discapacidad (Senadis) dio a conocer la nómina de organizaciones públicas y privadas que obtuvieron, este año y hasta el 2019, el “Sello Inclusivo” que involucra distintas categorías donde un factor común es la accesibilidad. Y entre todas las instituciones públicas y privadas que postularon en la categoría «Accesibilidad web», la que obtuvo el mayor puntaje fue el Servicio Nacional de Capacitación y Empleo (Sence).

Durante el año 2017, el sitio de Sence recibió 19.137.350 visitas, y de ellas, más de 150 mil están relacionadas a los programas +Capaz y Capacitación en Oficios, y en general a todas las oportunidades Sence.

El reconocimiento del Senadis a esta iniciativa institucional es muy importante para el Sence, pues constituye un respaldo a lo que hasta ahora hemos construido. Son los cimientos de lo que sin dudas será un Sence con acceso universal, impulsado desde lo público, y que a la luz de este cambio cultural sin retorno, debe incorporarse como una Política de Estado.

En la institución nuestra visión ha sido esa, ejecutando cursos de capacitación inclusivos y especializados que se realizan a través del Programa +Capaz, que a la fecha ya han capacitado alrededor de 5 mil personas en situación de discapacidad con un presupuesto público de más de 150 mil millones de pesos para ambas líneas. También hemos desarrollado iniciativas como el Programa Aprendices o las Becas Laborales, porque nuestro objetivo es potenciar los talentos y construir desde la diferencia, respetando el valor de cada persona.

A paso lento, pero seguro, Chile avanza en la transformación del paradigma cultural que aborda con una mirada asistencialista la situación de las personas con discapacidad. Aunque queda mucho por hacer, cada vez más vemos un enfoque centrado en los derechos, que respeta la dignidad de quienes viven con esta condición.

Si queremos construir un Chile más justo e inclusivo resulta imprescindible que todos y todas tengan las mismas oportunidades, que desde la génesis y el centro más profundo de las políticas públicas el concepto sea acuñado. El acceso universal debe ser una realidad garantizada y no una aspiración.