La famosa editorial de cómics estadounidense Marvel publicó en 2002 una historia en la que los hermanos Rothstein reproducían las actitudes mafiosas, corruptas y lascivas del ex productor de Hollywood.
Pese a que los abusos sexuales del poderoso ex productor hollywoodiense Harvey Weinstein estuvieron silenciados durante años, en realidad, hubo pequeñas voces que hace décadas ya había insinuado lo que pasaba detrás de la pantalla.
La famosa editorial de cómics estadounidense Marvel, que popularizó conocidos superhéroes como Spider-Man, Hulk, Iron Man o los X-Men, entre otros, publicó en 2002 “Get Kraven”. El cómic era protagonizado por quien hasta entonces había sido uno de los enemigos de Spider Man, Alyosha Kravinov (el hijo bastardo de Kraven El Cazador) pero que ahora, bajo el diminutivo de «Al», había empezado a salir con Timber Hughes, una aspirante a actriz que trabajaba como camarera en un bar para criminales.
En el cómic, donde Spider Man aparece en muy pocas de las viñetas, Kraven, queriendo ayudar a Timber en su carrera en Hollywood, se convierte en director. Sin embargo, sus esfuerzos se ven bloqueados por la arrogancia, la avaricia y la corrupción de la élite de Hollywood, encabezada por los hermanos Rothstein, ejecutivos corruptos, avariciosos y lascivos que utilizan la industria cinematográfica como tapadera y que ven en Timber Hughes su objetivo perfecto.
En el cómic, de seis números firmado por Ron Zimmerman (Ultimate Adventures, Rawhide Kid), los hermanos Weinstein se llamaban Joseph y Harold Rothstein, aunque la similitud física, su apellido judío y su actitud casi mafiosa hace que la asociación entre personajes y sujetos reales sea muy evidente.
La historia termina con la venganza tanto de Al como de Timber contra los indeseables Rothstein.
Este febrero Panini aprovechará para reeditar el cómic con otro nombre: «Monstruos de Hollywood».