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La diputada del Partido Humanista difundió el «Decálogo de la Abuela» para exponer sus principios como parlamentaria y de paso cuestionar la visita de Maite Orsini y Gabriel Boric a Ricardo Palma Salamanca.
A través de un documento llamado «Decálogo de La Abuela», la diputada Pamela Jiles dio a conocer su postura sobre la polémica que ha causado al interior del Frente Amplio la visita de sus pares Gabriel Boric y Maite Orsini a Ricardo Palma Salamanca en París.
«Frente a los hechos que involucran a dos diputados del Frente Amplio, considero que el fondo aquí es la transparencia y la probidad», escribió la parlamentaria humanista, agregando que «desde el FA hemos hecho gárgaras rechazando la falta de transparencia en la política. No hay espacio para doble estándar en esta materia».
Jiles enfatizó que «no me parece aceptable sostener reuniones políticas secretas», añadiendo que en su labor no acepta dinero, regalos ni prebendas de ninguna especie.
A la vez, señaló que «no acepto invitaciones financiadas por personas u organizaciones fuera de las oficiales y aprobadas por el Congreso», recalcando también que «no utilizo fondos públicos para ningún fin que no esté explícitamente regulado por la ley».
En su decálogo, la diputada humanista añadió que «no acepto viajes financiados por entidades nacionales, internacionales, comerciales o políticas, no importa si es la OLP o los Niños Cantores de Viena».
«No doy audiencias reservadas a nadie, se trate de personas naturales, autoridades, organismos u organizaciones», sentenció, asegurando que para todos los efectos en «relación con las audiencias y reuniones me apego estrictamente a la ley del lobby que fue creada justamente para garantizar la transparencia de estos contactos».
En su documento, Pamela Jiles enfatizó que no conduce bajo los efectos del alcohol y que «soy partidaria de que todos los parlamentarios nos realicemos exámenes periódicos de drogas como un requisito para seguir en este rol».
«No participo en cocinas ni en comisiones truchas digitadas en La Moneda; nada fuera del ámbito soberano del Parlamento», fue otro de los puntos de la parlamentaria.
Al cierre, Jiles enfatizó que «estoy convencida de que la probidad y la transparencia absoluta son el capital político esencial del Frente Amplio y rechazo cualquier vulneración a este mandato».
