Boca Juniors informó este lunes la aparición de un “brote de contagio” de coronavirus dentro de su “burbuja sanitaria” y suspendió por 72 horas los entrenamientos para evitar la propagación del coronavirus, a tres semanas del de la Copa Libertadores de América.
”Durante la noche del viernes 28 de agosto se detectaron síntomas compatibles COVID-19, por lo que el día siguiente se realizaron tests de hisopado rápido, que a algunos integrantes del plantel les dio resultado positivo, por lo que el domingo 30 se repitieron los tests PCR a todos los integrantes de la delegación, arrojando la aparición de un brote de contagio”, dijo el club a través de su sitio web.
”A excepción de un jugador, se pudo identificar previo a la aparición de síntomas a aquellos que dieron positivo, estando al día de la fecha aislados en la concentración, bajo estricta supervisión médica, kinésica, nutricional y psicológica. El estado de salud es excelente en todos los casos, esperando los tiempos sanitarios y médicos para el pronto retorno a la actividad”, añade el texto.
El equipo ‘Xeneize’, que el 17 de septiembre visitará al Libertad paraguayo en la tercera jornada de la Copa Libertadores, aisló a “toda la delegación” en sus respectivas habitaciones y suspendió los entrenamientos por al menos 72 horas.
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El plantel se encuentra en las instalaciones que el club tiene en la provincia de Buenos Aires.
Boca Juniors informó que desde el retorno de las prácticas, el pasado 10 de agosto, los jugadores fueron evaluados dos veces por semana, siempre con resultados negativos.
Según la prensa local, habría casi una veintena de contagiados, varios de ellos futbolistas, y por eso el entrenador, Miguel Ángel Russo, de 64 años y recuperado de cáncer de próstata en 2018, dejó las instalaciones.
El mediocampista Iván Marcone dio positivo hace dos semanas y está aislado desde entonces.