¿Cómo se cuidan los futbolistas para mantenerse en lo más alto?

El fútbol es uno de los deportes más seguidos del mundo. Su alta competitividad combina a la perfección con la técnica innata que deben tener los protagonistas, así como con el óptimo estado físico para aguantar los 90 minutos que suelen durar los encuentros. Sobre este último aspecto es donde haremos hincapié en este artículo, repasando cómo se cuidan los profesionales del balompié para poder terminar el curso con medio centenar o más de choques a sus espaldas.

Y es que los grandes jugadores cada vez están en un mejor estado de forma, algo que se puede ver en la edad de la retirada, mucho más avanzada a la de hace lustros. Esto se debe, en gran parte, al seguimiento de regímenes y ciertas rutinas que usan los principales equipos para seguir ampliando el palmarés. Y es que las grandes potencias, aquellas que según las apuestas deportivas son las favoritas para alzar los trofeos más deseados, disponen de departamentos especializados en cuidar hasta el último aspecto el día a día.

Hábitos generales y fundamentales

Hay una serie de buenos hábitos que cualquier deportista de primer nivel debe tener. Uno de ellos es la alimentación, que dependerá del tipo disciplina que se practique. Entre la dieta ideal y equilibrada del mundo del fútbol, destacan las frutas y los vegetales, sobre todo cuando son jóvenes promesas todavía en periodo de desarrollo.

Pero lo más habitual es la gran presencia de pasta y arroz, que da energía a todos los músculos del cuerpo y ayuda a rendir de una forma más constante dentro de un largo periodo de tiempo.

La comida es fundamental, pero todo aquel que haga deporte de forma asidua sabrá que la hidratación tiene un rol muy importante. La pérdida de fluidos durante el ejercicio es de lo más habitual y llega un punto en que, si no se recupera líquido, empezarán a aparecer los problemas musculares, la fatiga o incluso los mareos. Es por ese motivo por lo que es habitual que, en momentos puntuales del encuentro, los futbolistas acudan a la banda y beban de sus botellines agua o bebidas isotónicas.

Los momentos de antes y después de realizar el ejercicio también se deben cuidar al detalle. Es casi obligatorio realizar calentamientos de una intensidad creciente antes de entrar a competir, ya sea desde el inicio o durante el transcurso, para evitar lesiones de sobreesfuerzo. También las horas de descanso, que algunos protagonistas han reconocido que superan las ocho de sueño generalmente recomendadas a la ciudadanía. Se trata de una manera, no solamente de relajar el físico, muy exigido en un corto espacio de tiempo, sino también la mente.

Especialistas a disposición

Los grandes equipos de fútbol, como los de otras disciplinas, disponen de especialistas a su servicio que analizan y monitorizan las actividades de sus jugadores. Eso hace que, dependiendo de cada circunstancia, se apliquen algunas particularidades en algunos casos. Por ejemplo, no se puede tratar del mismo modo a un jugador que sale de una lesión de larga duración o una joven promesa que todavía no ha desarrollado su físico como sus compañeros del primer equipo. Ambos tendrán especificaciones para adaptarse a sus situaciones.

Por otro lado, cada vez se da más importancia a la salud mental de los profesionales, clave para rendir a primer nivel. En muchas ocasiones, están sometidos a una gran presión y, aunque dispongan de un buen estado físico y de una técnica inigualable, sus pensamientos no reman a su favor. Trabajar la fortaleza mental es algo que preocupa a los equipos de fútbol, que incorporan psicólogos para trabajar interiormente y saber gestionar los sentimientos. Este fenómeno se ha normalizado en los últimos tiempos, tal y como se está haciendo en la sociedad.