Declaraciones enfrentadas entre la Delegada Presidencial de la Región Metropolitana, Constanza Martínez, con el presidente de Blanco y Negro (ByN), Alfredo Stöhwing, respecto a la presencia de los 12.820 aficionados del Cacique sancionados por incidentes en la Supercopa, en el próximo Superclásico entre Colo Colo y Universidad de Chile.
La controversia surge tras los desmanes en la Supercopa donde los albos fueron sancionados con todo el público de la Galería Norte sin poder asistir a cinco partidos como locales.
En ese escenario, Stöhwing aseguró, tras el compromiso con Sportivo Trinidense por Copa Libertadores, que la sanción estaba “congelada” tras la apelación a la segunda sala del Tribunal de Disciplina, sugiriendo que los hinchas podrían asistir al clásico.
“Efectiva y favorablemente admitieron la orden de no innovar, así que puede asistir el público formal de la tribuna Arica al partido”, afirmó el presidente de ByN.
Sin embargo, Martínez negó rotundamente esta posibilidad, «no hay quien esté por sobre la ley. Vamos a estar trabajando en resguardar la realización del fútbol de manera normal”.
Según la delegada presidencial, para un desarrollo del fútbol sin violencia es necesaria la colaboración entre todos los actores involucrados. “Para nosotros como Gobierno es muy importante el fútbol porque implica un nivel de coordinación y de encuentro de las familias, por eso trabajamos bien decididamente en poder generar las condiciones de seguridad, para eso necesitamos la voluntad de los hinchas, clubes y mundo político”.
A pesar de la apelación de ByN, la Corte de Apelaciones declaró inadmisibles los recursos de protección, apoyando la postura gubernamental y manteniendo la sanción a los hinchas.