Las dudas que levanta la ley que obliga a tener un gestor de inclusión por empresas

El 1 de noviembre entró en vigencia la ley 21.275, que “modifica el Código del Trabajo, para exigir de las empresas pertinentes la adopción de medidas que faciliten la inclusión laboral de los trabajadores con discapacidad”, a través de mínimo un/a gestor/a de inclusión obligatorio para las empresas con más de 100 trabajadores/as. 

Gestor que, según la ley, debe ser parte del área de recursos humanos y contar con la certificación de ChileValora. Función que busca facilitar la inclusión laboral de 53 mil trabajadores con discapacidad o con asignación estimativa, repartidos en 15 mil empresas en todo el país, según registros internos de la Dirección del Trabajo (2018 a 2022). 

Pero desde Fundación Ronda, organización experta en temáticas de equidad, diversidad e inclusión y que fue parte de la mesa de ChileValora que definió los lineamientos de la persona que realizará dicha función, miran con cierta reticencia la nueva ley. 

“Si bien hay una exigencia del 1 % de contratación de personas con discapacidad, hay medidas alternativas que permite la ley y que favorece a que una empresa en vez de realizar una transformación en su cultura hacia la inclusión, prefiera, por ejemplo, contratar a una empresa externa que sí tenga a trabajadores con discapacidad y así cumplir la cuota”, explica Ana María Acuña, directora de Responsabilidad Social Inclusiva de Fundación Ronda. 

Reunión de Fundación Ronda

¿Vacíos en la ley?

Acuña advierte que la ley no obliga a la empresa a asignar recursos o atribuciones al gestor/a, lo que podría significar un problema futuro. 

“Para poder realizar un diagnóstico y coordinar la implementación de un plan de inclusión y capacitación, necesita tener atribución, o por lo menos, una validación de la jefatura, como la gerencia de recursos humanos (…), si no, va a depender de las convicciones de la organización y sus valores para dar cumplimiento al espíritu de esta ley más allá del deseo de estar en norma para no recibir una sanción”, puntualiza. 

Problema que también se relaciona con la inexactitud de la ley sobre el número de gestores y la cantidad de trabajadores de la empresa. “¿Qué pasa con las empresas grandes, con 4 mil o 5 mil trabajadores?”, cuestionan desde Ronda. 

Yerko González, terapeuta ocupacional y coordinador general de inclusión socio laboral de Ronda es uno de los primeros gestores de inclusión certificado en Chile. Sobre la ley, explica que desde la fundación “sugerimos a las empresas grandes contar con más de un gestor” y que desde Ronda ya “hemos capacitado a 5 gestores para una misma organización”. 

Aunque desde ChileValora, entidad a cargo de la certificación de los gestores, valoran positivamente la nueva ley y la disposición de las empresas para adecuarse a los nuevos parámetros del Código del Trabajo. 

“Pasamos de tener dos centros de certificación a nueve”. Así lo manifestó Ximena Rivillo, secretaria ejecutiva de ChileValora al Diario Financiero. De hecho, según los datos de la entidad, ya hay más de 400 personas certificadas y 1.500 que se encuentran en proceso de certficación. 

Pese a las dudas, desde la Fundación entienden que la ley es un paso importante para avanzar en la inclusión laboral, y que el gestor “viene a mantener y propiciar instancias inclusivas dentro de las organizaciones, y desde la experiencia que hemos visto en otros países viene a fomentar la cultura inclusiva en las organizaciones”, concluye González.