La retrógrada campaña premiaba con 40.000 euros y hamburguesas gratis de por vida a las mujeres rusas embarazadas de alguna estrella de la competencia para asegurar «el éxito de la Selección Rusa en las próximas generaciones».
Ofensivo, machista y casi inverosímil, pero es cierto. En pleno siglo XXI y con las movilizaciones feministas exigiendo que se respeten nada más que sus derechos, una cadena de comida rápida nos devolvió por un momento varios años atrás.
Burger King debió salir a pedir disculpas y a retirar todos los anuncios de su marca en Rusia vinculados al Mundial que se realiza en ese país, debido a una campaña que se ganó el repudio del mundo entero y por una justa razón: buscaba premiar a las mujeres que quedaran embarazadas de estrellas del fútbol.
«Ofrecemos disculpas por el anuncio que hicimos, fue demasiado ofensivo», señalaron desde la empresa mediante un comunicado, y agregaron que «nos apresuramos a informarles de que ya hemos eliminado todos los materiales relacionados con el anuncio».
La retrógrada campaña premiaba con 40.000 euros y hamburguesas gratis de por vida a las mujeres rusas embarazadas de algún futbolista que asistiera a la competencia, para así, decían, asegurar «el éxito de la Selección Rusa en las próximas generaciones».