Desde el 3 de enero pasado, las municipalidades de La Serena y Zapallar, en la cuarta región, implementaron este servicio de traslado nocturno para el carrete ABC1. El servicio es gratuito para los usuarios.
La particular medida se aplica justo en zonas concurridas por turistas provenientes de sectores de altos ingresos del país, y sólo funciona durante la noche para dar seguridad a los jóvenes que carretean hasta altas horas de las noches, y muchas veces, con altos niveles de consumo de alcohol.
Algunos carretes ABC1 durante 2013 tuvieron lamentables consecuencias, como sucedió en Curanipe mientras se desarrollaban los festejos de fiestas patrias. Durante esa fecha, la pequeña localidad de la Región del Maule fue prácticamente invadida para la larga semana de festejos que vivió el país. ¿El motivo? Una nueva forma de organizar el carrete diciochero hacía su desembarco en el pueblito de la comuna de Pelluhue.
No existe claridad de quién o quiénes escogen el lugar, pero la invitación se extiende por las redes sociales de universitarios. Con anticipación, arriendan las cabañas del lugar y llegan en grupos abastecidos de los alimentos y tragos necesarios para el carrete. Sin acompañamiento de adultos, al estilo «spring break» estadounidense.
La nota negativa la puso como siempre la crónica roja. Durante los festejos dichicheros en Curanipe hubo dos accidentes de tránsito con el mismo factor común denominador: conductores que habían consumido alcochol y atropellaron a sus víctimas. Uno de los protagonistas de esas tragedias fue, Martín, hijo de Carlos Larrain, quién podría ser reformalizado luego que un nuevo informe del Servicio Médico Legal (SML) indicara que su víctima, Hernán Canales, pudo haber sobrevivido unos 15 minutos tras ser atropellado.
Por mientras y para que nos repitan tragedias como la de fiestas patrias, los carretes juveniles ABC1 cuentan con el servicio de traslado nocturno para no tener que ponerse frente al volante, y así no causar nuevas tragedias por culpa del consumo irresponsable de alcohol. El sistema funciona a través del sitio www.kmovil.cl, y cuenta con lujosas vans equipadas con GPS para que los padres puedan saber la ubicación exacta de sus hijos a través de la web.