Sebastián Acevedo esperaba locomoción para dirigirse a su trabajo cuando 30 agentes de la CNI irrumpieron en su casa y se llevaron a María Candelaria, militante de las JJCC, para más tarde detener a su hermano Galo.
El trabajador intentó infructuosamente obtener información sobre el paradero de sus hijos, pero la desesperación terminó por hacerlo tomar una radical decisión. Durante la mañana del 11 de noviembre, Acevedo marcó otro hito en la triste historia de los derechos humanos en Chile y decidió inmolarse para frenar la tortura de sus hijos.
“Quienes participamos durante esos años de dictadura de la permanente denuncia del Movimiento Contra la Tortura Sebastián Acevedo, te invitamos a recordar, a hacer memoria viva de aquel testimonio pues hoy en nuestro país, la violación de los Derechos Humanos sigue existiendo, cuestionando la institucionalidad democrática y a todos nosotros como parte de la comunidad”, señalaron los organizadores.
El acto se realizará el próximo 11 de noviembre, en la explanada frente al Museo de Arte Contemporáneo del Parque Forestal, a las 19 horas.