En entrevista con La Tercera, Lorena Fríes aseguró que estos problemas vulnerar el derecho de hombres y mujeres a vivir en un ambiente libre de contaminación, pero además tensionan el acceso al agua potable para beber y para el aseo, lo que cuestiona las prioridades del Estado. «También se ven vulnerados el derecho a la salud como consecuencia de la contaminación y, en resumen, al derecho a una vida digna«, señaló.
En atención a los conflictos que se desarrollaron hoy en diversos puntos de Chile, en la localidad de Caimanes ya hay observadores del INDH preparando un informe que enviarán prontamente a las autoridades.
Según Lorena Fríes, las comunidades indígenas son una de las más vulnerables a las consecuencias de los proyectos de inversión, así como las comunidades campesinas y de pescadores.
«No cabe duda de que hoy en día se observa una ciudadanía más informada de las externalidades negativas que estos proyectos provocan, y que se refleja en las movilizaciones sociales impulsadas en ejercicio de la libertad de expresión y de reunión. Y eso, porque el desarrollo del país no puede ser a costa del sacrificio de las comunidades o de hipotecar su futuro«, argumentó la directora del INDH.