Entre los principales reparos que señalaron los dirigentes y sus asesores están la ausencia de la negociación por rama, el debilitamiento de los sindicatos a través del aumento de causales de desafuero y la flexibilidad pactada. Según señaló el abogado laboralista y académico de la UDP Cristián Toledo, “el proyecto lanza la piedra y esconde la mano en cuanto a buscar un sindicalismo débil para flexibilizar normas”.
Ante los diputados Carmona (PC) Melero y Barros (UDI), Andrade (PS), Campos (PPD) y Monckeberg (RN), en tanto, el vocero de la Unión Portuaria señaló que es necesaria una propuesta país de reforma laboral, que integre a los trabajadores en su confección. “Si paramos para negociar es porque llevamos años de intentos de diálogo y al empresariado no le interesa”, indicó.
Además, advirtió a los legisladores que de no integrar los reparos y propuestas de los trabajadores, habrá descontento y movilizaciones. “Si no hay disposición para dialogar y hacer cambios al proyecto, habrá paralizaciones en sectores productivos importantes”, declaró.