Por mayoría, la comisión aprobó la indicación que despenaliza la causal de riesgo vital para la madre e inviabilidad del feto. Esto último, en caso de que «el embrión o feto padezca una alteración estructural congénita o genética incompatible con la vida extrauterina». En este sentido, el presidente de la comisión, Juan Luis Castro (PS) recordó que será un requisito que el feto padezca una malformación letal, porque si existe una condición que sea compatible con la vida no será posible llevarlo a cabo.
En tanto, la idea que ha generado más polémica en el proyecto, y que se refiere a la despenalización del aborto en causa de violación, quedó pendiente para el próximo lunes 14 de septiembre, fecha en que también se analizarán los programas de acompañamiento para madres (polémicos, dada las denuncias de sectores feministas) y la objeción de conciencia para el personal médico.
En la interna, existe preocupación por las posturas de los parlamentarios cuando la iniciativa sea votada en sala. Especialmente, respecto una supuesta mala redacción del proyecto, que podría derivarlo a la Comisión de Constitución y complicar aún más su tramitación legislativa. Además, se espera una serie de votos en contra para la causal de violación, contemplada en la iniciativa, cuando ésta sea votada en la Cámara de Diputados, el próximo 7 de octubre.