El video, registrado en la Plaza Ñuñoa y horas antes de la marcha estudiantil no autorizada de ayer jueves 26, muestra cómo un retén móvil detiene aparentemente de manera arbitraria e irregular a un adolescente que se encontraba con sus amigos para acudir a la movilización convocada por los secundarios en el epicentro de la capital.
Por lo que relatan tanto uniformados como estudiantes, uno de los secundarios portaba un lienzo, motivo por el que Carabineros se acercó al joven para requisárselo; situación que derivó en que un funcionario lo invitara a entrar al furgón policial para consignar el número de teléfono de sus padres. El adolescente obedece pese a la desconfianza que demuestra.
La maniobra de hacerlo ingresar fue interpretada por sus compañeros, en un comienzo, como una estrategia del carabinero para eludir la grabación, sin embargo para sorpresa de todos, el joven es impedido de bajar del furgón cuando intenta hacerlo normalmente y sólo ahí se percatan que la intención de Carabineros era llevarlo detenido. «¿Qué está pasando, hombre?» dice el adolescente que, al parecer, no supera los dieciséis años.
El estudiante fue llevado a la 18a comisaría de Ñuñoa, bajo los cargos de «protección de derecho», según menciona tres veces el uniformado que realizó la detención, cuando es interrogado por los amigos del secundario.