La infancia y adolescencia de Beausejour: «Si Jean no hubiese sido futbolista habría sido dirigente estudiantil»

Una revisión de aspectos desconocidos de la vida del futbolista de la selección chilena Jean Beausejour ,es la que esta mañana fue publicada en un diario nacional.

El artículo, que recoge el testimonio de familiares, amigos e importantes personajes de la vida del deportista de 32 años, se destaca el interés de Beausejour por la lectura y el aprendizaje. En el texto de La Tercera, afirman que en la casa de la familia materna de Jean hay un gran librero que el lateral izquierdo nutre constantemente. «Lee todas las noches antes de dormir, en la habitación o cuando se concentra”, asegura una familiar que opta por el anonimato. “Siempre fue así, diferente. No es que sea distinto a los demás, es que a él no le interesan las cosas superficiales”, agrega.

El texto afirma que las últimas lecturas del futbolista fueron «La Casa de Todos», de Patricio Zapata, y el reconocido «Historia Secreta de Chile», de Jorge Baradit. “Él siempre ha manifestado mucho interés por conocer y estudiar la historia y la política. Conversa con intelectuales y hace poco criticó al historiador Sergio Villalobos, quien siempre ha menospreciado la historia de nuestro pueblo”, apunta Manuel Puelma Coliqueo, primo de Beausejour.

Pero los pasajes que más llaman la atención son aquellos que hablan de su infancia. Jean Beusejour Coliqueo creció en la población Brasilia de Las Rejas Sur de Estación Central. En 1991 estudió en la Escuela Holanda, de la que Doris Morales era profesora de religión y tuvo la oportunidad de hacerle clases al deportista. “Él era muy opinante. Se enojaba mucho porque justo en esa época estaba la serie «Carrusel de Niños» y a él lo molestaban con Cirilo, el negrito. Era muy orgulloso de sus raíces y siempre pedía que se le llamara por sus dos apellidos”, señala Morales.

El artículo recoge también las palabras de quien fuera su profesora de matemáticas en el Liceo Polivalente Guillermi Feliú Cruz, donde cursó 2º y 3º medio. “A él le gustaba la historia, eso era lo suyo, pero no le gustaba quedar como tonto frente a los otros ramos”, dice la docente. “Él no era tan buen alumno, era más bien del 5.0 al 5.5, pero tenía otras cualidades: hablaba muy bien, era muy respetuoso y siempre estaba muy bien presentado. No era un cabeza de pelota. Pienso que, en el fondo, eso es ser un alumno integral y así lo ha demostrado hasta ahora”, comenta la profesora.

María Luisa Pizarro, quien fuera su profesora jefa durante esa época en el Liceo, dijo a La Tercera que recuerda a un adolescente Jean «muy pobre, que llegaba en invierno a clases con la pura camisa. Pero era un pobre muy asumido, lo llevaba muy dignamente porque sabía para dónde iba, que saldría de ahí. No me extrañó todo el éxito que tuvo, si no hubiese sido futbolista habría sido universitario”.

El texto consulta también la opinión del periodista Pedro Cayuqueo, autor del libro de crónicas indígenas «Sólo por ser indios», que se vio en manos de futbolista en 2014, razón por la que Cayuqueo lo contactó para que comentaran la lectura. Desde allí que ha seguido la carrera del zurdo. “Su tío fue dirigente estudiantil (…) Así como Gary Medel dijo que si no hubiese sido futbolista, habría sido traficante; si Jean no hubiese sido futbolista habría sido dirigente estudiantil. Seguro”, asegura el escritor.