Una de las prioridades para la gestión del nuevo alcalde de Santiago, Felipe Alessandri, es erradicar la comida callejera del centro del capital, donde abundan los carritos de sopaipillas o las ventas de papitas y pollo frito al paso.
«No tienen permiso ni resolución sanitaria (…) Yo no sé si ese ceviche tiene cadena de frío y los anticuchos no sé de dónde vienen«, enfatizó Alessandri en referencia al tema, en octubre del año pasado.
Según consigna El Dínamo, el alcalde cumple sus promesas y esta semana un equipo municipal realizó los primeros decomisos de comercio de alimentos ilegal en distintos puntos de Santiago.
La iniciativa se enmarca dentro del Plan Comercio Justo, impulsado por el edil de la comuna, que pretende reforzar la fiscalización con cerca de dos o tres operativos diarios a los vendedores. Hasta antes del inicio de la gestión de Alessandri, solo se realizaba uno de estos operativos al día.
Pero hay más: los vendedores ambulantes no serán los únicos castigados, sino que los compradores que sean sorprendidos consumiendo este tipo de alimentos también recibirán sanciones. Para ello, la autoridad comunal dispuso de cámaras fotográficas que identificarán a quienes no cumplan con la norma.
La dura pelea contra el comercio ilegal se centrará en los siguientes sectores: Parque O’Higgins, Meiggs, Franklin y en mas de ocho ferias libres emblemáticas.