Luego de que el contralor de la República, Jorge Bermúdez, denunciara ante la Fiscalía a cinco jefes de finanzas de altos servicios públicos por detectar irregularidades, hoy se supo que los involucrados son miembros de un hospital regional y dos gobernaciones regionales: la Subsecretaría de Desarrollo Regional y el Ministerio de Obras Públicas.
Según consigna La Tercera, la información surge luego de que Bermúdez diera a conocer la investigación realizada, que se concretó mediante muestras aleatorias a entidades públicas que manejan altos montos de dinero en sus presupuestos. Sin embargo, no dio a conocer los nombres de las instituciones afectadas.
“Descubrimos situaciones tan anómalas como cónyuges de funcionarios con grandes patrimonios (…) Pero lo peor que detectamos es que sociedades familiares de esos jefes son contratadas por el misma agencia de servicio público en que éstos trabajan”, enfatizó el contralor.
La Ley de Presupuesto indica que el MOP maneja un presupuesto estimado de casi 600 millones de pesos al año, mientras que la Subdere llegaría a los mil millones en el mismo período. Según el contralor, las auditorías se realizaron durante dos semanas, contrastando las declaraciones de intereses de algunos funcionarios públicos con la información registrada en los antecedentes del Estado.
La investigación se activó tras el millonario fraude de Carabineros de Chile que fue detectado hace unas semanas. Los hallazgos, sin embargo, sorprendieron al Gobierno, que no estaba informado de la denuncia del Contralor.
Al respecto, la vocera Paula Narváez manifestó que «este gobierno fue el que impulsó la ley de probidad en la función pública y prevención de los conflictos de interés. Y si hay situaciones irregulares que se detecten éstas deben ser denunciadas».