Mega desvincula a 24 trabajadores y Sindicato acusa amedrentamiento previo a negociación colectiva

Durante el pasado martes, el canal Mega desvinculó a 24 trabajadores de diversas áreas. Según anunciaron en un comunicado, la decisión responde a razones de presupuesto en la señal liderada por el Grupo Bethia.

«Esta medida se enmarca dentro de una estrategia de reducción de costos para mitigar resultados económicos estacionales adversos y asegurar la viabilidad del proyecto Mega en el largo plazo», sentenciaron desde el canal, argumentando que el impacto de la «revolución digital» ha afectado sus números.

«Es una medida dolorosa y que nos costó mucho tomarla, pero ésta y otras medidas de ahorro, son un proceso necesario para poder asegurar la viabilidad económica de la Empresa», argumentaron.

Sin embargo, desde el Sindicato de Trabajadores lamentaron la noticia y entregaron otra visión que explicaría los múltiples despidos: «Lamentamos profundamente desvinculación de 24 compañeros hoy en el canal. Es desalentador lidiar con ley laboral vigente y nula protección«, escribieron en Twitter.

Además, el conflicto también coincide con las negociaciones que han mantenido los trabajadores con la empresa para definir los servicios mínimos, otra arista de la Reforma Laboral que impide contratar personal externo en caso de huelga. Por ello, el Sindicato dio a conocer una declaración pública en donde refutan la versión del canal.

«Nos extraña demasiado, que este discurso que ha generado temor y rumores en los pasillos del canal, se haya introducido ahora, previo al proceso de negociación colectiva del Sindicato más representativo e importante del canal», sentenciaron.

Los trabajadores recordaron que, según un informe de la Superintendencia de Valores y Seguros entregado en abril pasado, Mega fue el canal de televisión con mayor crecimiento durante 2016, con utilidades que alcanzaron los US$10.899 millones.

«Hacemos un llamado a la empresa a la responsabilidad, a ser objetivos con la información que se entrega a los trabajadores. Porque derivar esa responsabilidad a los trabajadores no sólo es de mal gusto, sino que además podría ser vista como amedrentamiento y una mala práctica previo a un proceso de negociación colectiva», recalcaron.