La empresa minera Andes Iron tomó una decisión drástica luego de que el Comité de Ministros decidió el pasado 21 de agosto rechazar su proyecto minero-portuario Dominga –que pretendía instalarse en la comuna de La Higuera, en la Región de Coquimbo–, y estableció un proceso de reestructuración interna, que incluye que el 50% de su actual planta de trabajadores cesarán sus labores desde fines de septiembre.
Hasta el momento, cerca de 100 personas trabajaban en la compañía y las áreas más afectadas son aquellas ligadas a los estudios de ingeniería, geología, además de personal administrativo, según consigna El Mercurio. Además, Andes Iron decidió cerrar las dependencias y oficinas emplazadas en el Centro Empresarial de la ciudad de Coquimbo y las funciones se concentrarán en la Casona Dominga, en el frontis de la Plaza de Armas de la localidad de La Higuera.
El grupo integrado por los ministros de Agricultura, Salud, Medioambiente, Economía, Energía y Minería justificó su rechazo –que se suma al que también realizó en marzo pasado la Comisión de Evaluación Ambiental de Coquimbo– en que el proyecto «no se hace cargo de manera adecuada de los eventuales impactos significativos al medioambiente y la salud de las personas; en particular en temas como calidad de aire, contaminación lumínica, ruido, riesgo de accidentes y derrames en la operación portuaria».
Luego de que se conozca el informe elaborado por el Comité de Ministros –y donde se detallará los argumentos y el análisis en que se sustenta la decisión–, la empresa tendrá un plazo de 30 días para presentar un nuevo reclamo, esta vez ante Tribunales Ambientales. El futuro del resto de los trabajadores dependerá del veredicto, y se mantendrán en caso de caso de que este prospere.