“Necesitamos que la economía crezca, pero necesitamos que el crecimiento vaya de la mano del cuidado del medio ambiente», fueron las palabras de Michelle Bachelet con que le quitó el piso a su titular de Hacienda, Rodrigo Valdés, quien había criticado duramente a sus pares ministros que le dieron la lápida final al proyecto Dominga. “Algunos no tienen el crecimiento dentro de las prioridades más altas”, había afirmado un día antes.
Los rumores en torno a la tensa situación en La Moneda y el enojo de Valdés se extendieron durante todo el día. A solo 6 meses de que termine el gobierno, una posible renuncia del ministro de Hacienda generaría un terremoto político en ya deteriorado segundo mandato de Michelle Bachelet.
Esta mañana, Rodrigo Valdés llegó hasta las oficinas de Bachelet en La Moneda, donde estuvieron reunidos por cerca de una hora en medio de la expectación del país por una posible renuncia.
Valdés llegó al gabinete el 11 de mayo de 2015, en el primer cambio de ministro de Hacienda de todos los gobiernos desde el regreso de la democracia.
Las diferencias con otros ministros de gobierno no son nuevas para Valdés. Antes de Dominga, se enfrentó con la entonces ministra del Trabajo Ximena Rincón -y con su sucesora Alejandra Krauss- sobre la reforma al sistema de pensiones.