Por orden del juez Mario Carroza, la Brigada de Inteligencia Policial de la PDI investigará los cerca de 500 casos de niños y niñas que fueron enviados al extranjero entre 1973 y 1990, hechos vinculados a las denuncias contra la asistente social Telma Uribe.
El nuevo proceso se enfocará en las carpetas, cartas y cuadernos de la profesional, los que fueron analizados por una perito que elaboró un informe donde daba cuenta de 579 casos registrados entre 1950 y 2001.
Según consigna La Tercera, de esos casos, 525 corresponden a niños que fueron acogidos en el exterior por familias extranjeras. No obstante, Carroza está autorizado a investigar los casos referidos al periodo de la dictadura, por la que el universo a analizar se reduce a 488.
De acuerdo a los documentos de Uribe que fueron analizados por peritos, el modus operandi se basaba en la visita de las «captadoras» a los hospitales, maternidades y fundaciones para detectar a madres en situación vulnerable y pedirles que les entregaran a sus hijos.
El peritaje indica que «en la gran mayoría de los casos reservados existe, efectivamente, aporte económico por diversos conceptos», en alusión a montos que correspondían a sustitución de sueldos, compra de útiles personales, curación de heridas de cesáreas, cancelación de deudas por servicios básicos, compra de camas y el pago del 50% del valor de la clínica.
La detective a cargo del análisis tendrá que determinar si existen más antecedentes y si las personas mencionadas en los informes son ubicables en la actualidad. En los antecedentes que maneja la PDI se indica que un total de 266 niños fueron vinculados a la organización The American Adoption Agency, mientras que otros 22 casos pertenecen al Evangelical Adoption and Family Service, con 22 casos y otros 11 aNew York Study Service, con 11.