Con una inversión de 231 millones de dólares, el Hospital de Antofagasta era una de las concesiones más caras a nivel de salud.
Sin embargo, según informa El Mercurio, al poco tiempo de haber entrado en funcionamiento el hospital empezó a presentar serias falencias. el primer indicio de esto fueron las protestas que se generaron a finales de marzo por parte del personal de salud, que exigía mayor seguridad ante asaltos y balaceras. Pero no son los únicos problemas.
«Hemos recibido un hospital que no tiene la capacidad para atender a la población de Antofagasta. Tiene una capacidad muy similar al antiguo. Hoy está funcionando con 430 camas, pero necesitamos más», comentó a El Mercurio el doctor Gustavo Soto, jefe de Neurocirugía.
Además, aseguró que el laboratorio no está funcionando al 100% y que el servidor informático es incompatible con el 50% de los equipos. También denuncio problemas de aseo en los baños, fallas en los ascensores, carencia de ropa en pabellones y problemas de temperatura en las salas.
En tanto Igor Protasowicki, el gerente general de la Concesionaria Salud Siglo XXI -compuesto por Sacyr Concesiones Chile S.A., SNC-Lavalin Infraestructura Chile SpA y Global Dominion Access S.A.-, raccionó bastante más calmado diciendo que «el hospital está funcionando en prácticamente todas sus funciones y servicios. algunos servicios han tenido ciertos problemas por aspectos puntuales».
Sobre las camas, señaló que el contrato de la concesionaria con el Estado contempla un aumento de camas a 671 en 5 años.
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