Hernán Larraín Matte, presidente de Evópoli, se refirió al reciente episodio protagonizado por el renunciado ministro de las Culturas, Mauricio Rojas, y a diferencia de otras voces de su sector como Jacqueline Van Rysselberghe o Iván Moreira reconocer que hubo un error.
Debemos «asumir que cometimos un error», dijo a T13 el timonel de la tienda oficialista al comentar sobre la salida del gobierno de Rojas por sus dichos en que acusaba de «montaje» al Museo de la Memoria y los Derechos Humanos.
Junto con apuntar que toda esta trama, que comenzó el jueves pasado con la designación del autor de «Diálogo de Conversos», fue un aprendizaje, destacó que el presidente «rápidamente rectificó» y nombró a Consuelo Valdés com nueva titular del ministerio.
«Tengo la intuición que esto no estaba en el libreto de nadie pero lo importante es que el Presidente Piñera evaluó la circunstancias», sostuvo Larraín Matte.
Por otra parte, también subrayó que esta situación dejó en evidenció la relevancia que tiene en Chile la discusión por los Derechos Humanos, como también el rol y el historial «intachable» de un ministro de las Culturas respecto a ese tema.
En tanto que hizo la diferencia entre lo que le pasó al ex ministro de Cultura que duró menos de 90 horas en cargo y el Canciller Roberto Ampuero, de quien se ha dicho comparte el perfil y la opinión de Rojas sobre el Museo.
Ante esto, indicó que «son casos totalmente distintos» y que «difícilmente va a llevar una polémica similar».