En 1986, Pedro Lemebel publicó un texto que no es del todo crónica, ni poesía ni una narración convencional, pero está ahí, al medio, con lo mejor de los tres géneros, y en el que habla sobre ser homosexual en Chile y vivir marginado por parte de la sociedad.
Y es ese texto, «Manifiesto, hablo por mi diferencia», el que fue recitado con furia y sensibilidad por Matías Catalán, un joven actor que se subió al Metro de Santiago e interpretó las líneas escritas por el artista que falleció en 2015.
«No soy Pasolini pidiendo explicaciones. No soy Ginsberg expulsado de Cuba. No soy un marica disfrazado de poeta. No necesito disfraz. Aquí está mi cara. Hablo por mi diferencia», recitó el joven ante los ojos y el silencio de las personas que iban en el vagón.
Más tarde, en su cuenta de Twitter, Catalán escribió junto a un video en el que comparte su intervención que «continuemos el legado, que no nos callen, salgamos a la calle con rabia, destrocemos su rutina, metámonos en sus vidas. Manifiesto, hablo por mi diferencia – Pedro Lemebel #pedrolemebel Metro de Santiago».