Se cansaron de Durán: La Moneda y la Iglesia Evangélica le dan la espalda al cuestionado obispo

Un duro fin de semana tuvo el Obispo Eduardo Durán, luego de que perdiera su cargo de representante protocolar ante el Gobierno de las iglesias evangélicas, y en el mismo día la Junta Nacional de Diáconos iniciara un proceso de destitución en su contra.

La decisión de la Junta Nacional de Diáconos se tomó después de que Durán leyera una declaración en la que no solo descartó su renuncia, sino que llegó a argumentar “quien me nombró acá como obispo a cargo de la congregación no fueron los hombres, si no que fue Dios todo poderoso”.

Esto, sumado a otros antecedentes, provocó que los diáconos de la Junta se reunieran y decidieran iniciar el proceso de destitución del obispo. Los directivos aprovecharon para anunciar que la administración de la Catedral Evangélica ya no estará en las manos de Durán, sino que pasará a las de Junta Nacional de Diáconos.

Durante esta jornada también, el Gobierno anunció que el Obispo Eduardo Durán dejó de ser el representante protocolar de la Primera Iglesia Metodista Pentecostal. Un cargo ejecutivo que se asigna año a año y  que desde ahora está en manos del pastor Jorge Méndez.

En una declaración leída por el diácono Pedro Chacón, los líderes de la Iglesia Evangélica, afirmaron que “el actuar del pastor Eduardo Durán Castro está alejado de los valores y principios que un pastor debe tener según las sagradas escrituras”.

Los diáconos de la directiva fueron muy directos, y afirmaron que “ha incurrido en falta de temor de Dios al utilizar los diezmos del señor para mantener una vida de lujo personal”.

Durante la jornada, también se registraron pequeñas manifestaciones en contra del Obispo en las afueras de sus oficinas.

Celestino Huaquilén, otro de los pastores parte de la directiva, fue aún más lejos, y declaró que “desde el día miércoles recién pasado, dejamos de reconocer a Eduardo Durán Castro como Obispo”.

“Él está en una posición intransigente”, afirmó Luis Gonzáles, otro de los diáconos parte de la directiva.

Por esto, los líderes evangélicos decidieron realizar una votación, de cuyo resultado depende la continuidad de Durán en su cargo.

Cabe recordar que Durán está siendo investigado por el delito de lavado de activos. También, ha sido cuestionado por su alto estilo de vida –específicamente sus autos de lujo-, y finalmente ha sido criticado por otros obispos y feligreses por anunciar su divorcio y un nuevo matrimonio.