En su último boletín estadístico, la Fiscalía Nacional estableció que el 2018 – año del auge del movimiento feminista en el país – hubo un significativo aumento en el número de casos de delitos sexuales, cifra que alcanzó las 28.132 causas ingresadas de este tipo. Este es el total más alto desde la implementación de la Reforma Procesal Penal y las cosas no parecen mejorar este año. Solo desde enero hasta abril de 2019, ya se han ingresado 9.544 causas de esta índole, confirmando una preocupante tendencia al alza de estos delitos.
Según los datos revisados por La Tercera, el crecimiento porcentual entre un año y otro también rompió una marca histórica desde el 2004. El 2017 el total de causas ingresadas fue de 22.766, lo que significa que hubo un aumento de un 23% para el 2018, de acuerdo con las cantidades oficiales entregadas por el Ministerio Público.
Desde el año 2004 a la fecha, la cantidad de causas por delitos sexuales casi siempre ha ido en aumento, y desde el 2010 el número de investigaciones de la Fiscalía relacionados con estos crímenes ha aumentado más de un 50%.
Sin embargo, el mismo medio también revela que, en un oficio remitido al congreso, el Ministerio Público advierte que “los estudios nacionales e internacionales sobre victimización sexual indican que la gran mayoría de los delitos sexuales no son develados por parte de las víctimas y menos aún conocidos por el sistema de justicia penal”.
Esto quiere decir que el número real de delitos sexuales cometidos en Chile sería significativamente mayor que el entregado por el organismo persecutor, que estimó que los casos en los que las víctimas no denuncian lo ocurrido alcanzan entre un 70% y un 90% del total.
En el oficio se concluye que este problema contribuye a la reiteración de las conductas agresivas y a la posibilidad de que más personas puedan ser potenciales víctimas del mismo o más agresores.