«Cualquier patipelado se siente con el derecho a insultar a alguien que trabaja en el servicio público». Esa fue la frase exacta con que la presidenta de la UDI, Jacqueline van Rysselberghe encendió la polémica este miércoles.
Tras una abundante cantidad de críticas, la senadora debió salir a explicar sus dichos, indicando que «no esperaba que se generara esta polémica».
«A lo mejor no es la mejor palabra; lo reconozco, pero a lo que yo me refería es a que hay gente que se ampara en el anonimato, las masas, muchos a cara cubierta, como enmascarados, incluso a través de las redes sociales, con nombres falsos, para insultar, para agredir y para incluso agredir físicamente. A mí me ha pasado«, aclaró la gremialista.
Igualmente, agregó que las personas «que usan la violencia tanto verbal como física para manifestar una posición política contraria, no merecen ningún tipo de respeto, independientemente de sus estudios, de su clase social; por lo menos de mi parte».
En Twitter, el hashtag #Patipelaos ha sido la tendencia número uno durante todo el día, haciendo hincapié los usuarios en el componente clasista de la palabra que empleó la parlamentaria.