Este lunes, el Ministerio de Salud en Los Lagos confirmó la presencia de diluyente en la red de cañerías de la comuna de Puerto Octay. En el suministro se detectó el compuesto «benceno» en una cantidad ocho veces más alta de lo permitido.
Esta información proviene de un informe del Instituto de Salud Pública (ISP), que fue presentado por el intendente Harry Jürguensen ante el quinto Comité Comunal de Emergencia, donde también se descartó la presencia de petróleo en las aguas.
De esta forma, a causa de los trabajos asociados, se estima que el suministro sería repuesto en un máximo de dos semanas.
La seremi de Salud Scarlet Molt indicó que, además de benceno, en algunos estanques se encontró fierro y manganeso, pero que podría estar asociado a las características de la zona.
Por su parte, la alcaldesa de Puerto Octay, Maria Elena Ojeda, señaló que ya se encuentra en curso la investigación que deberá establecer causas y responsabilidades en este caso.
Hasta ahora, la autoridad no descarta ninguna hipótesis respecto de la complicada situación que afecta a la comuna. «Todas las teorías las sostengo, hasta un acto terrorista. Cuesta decirlo, pero que alguien intente hacer algo así en nuestra agua, no puedo ponerle otro nombre», declaró a Radio Bio Bio.